Gente imperfecta en la Biblia Muestra

Abraham

Abraham es conocido como el más grande patriarca de la fe judía. Aún así, como era de una ciudad muy poblada llamada Ur, era de hecho un gentil (una persona no judía) antes de convertirse en el primer hebreo, y fue escogido por Dios para ser el padre de una gran nación.

A pesar de haber sido llamado por nuestro extraordinario Dios para cumplir propósitos del reino, solo era un hombre ordinario. Era un simple pastor que venía de padres que no seguían a Dios. Y aún en ese llamado, tomó malas decisiones. No siempre actuó de acuerdo con lo que un patriarca de la fe judía debía. Eso claramente no le importó a Dios. Él era el hombre escogido para la labor, y Dios no se sorprendió cuando su humanidad se interpuso en el camino.

No fue escogido porque fuese excepcionalmente talentoso o extremadamente sabio. Abraham no escribió ningún libro de la Biblia, no compartió profecías con la gente, y no escribió leyes en las tablas Lo más importante que sabemos sobre Abraham es que Él oyó la voz de Dios decirle que se fuera, y aunque no sabía a dónde, obedeció y dejó lo familiar por lo extraño.

Aquí hay dos aportes de la vida de Abraham:

Dios Usa a Todos

Las historia de Abraham es una que animará a aquellos que nos sentimos sin las credenciales o crianza correctas. Claramente, Abraham era un "nadie" a quien Dios llamó a ser el "alguien" para la nación hebrea. Quizá sientas que tienes poco que ofrecer porque no vienes de una familia lo suficientemente prestigiosa, o quizás no te sientes lo suficientemente inteligente para ser usado por Dios. Le puedo garantizar que Dios está buscando nuestra disposición para hacer la obra que Él ha planificado.

Nunca es Demasiado Tarde

Cuando Dios llamó a Abraham a que dejara su tierra nativa por un lugar desconocido, tenía 75 años. No se convirtió en padre sino hasta los 86 años, y no se circuncidó sino hasta los 99. Muchos piensan que mientras envejecen se convierten en menos importantes para el mundo y también para cumplir los propósitos de Dios. Mientras vivamos en esta tierra, tenemos un propósito que cumplir.

Dios es completamente capaz y está dispuesto a darnos lo que sea que necesitemos para cumplir sus propósitos. Así que, sea que nos sintamos equipados o seamos muy jóvenes o muy viejos, podemos ser usados por Dios para hacer Su gran obra. Él solo está buscando corazones disponibles que sean fieles.