La esperanza de la NavidadMuestra

Las buenas nuevas de Navidad Lee 1 Timoteo 2:5. La Navidad habla de buenas nuevas, pero no son buenas nuevas de regalos especiales ni de un gran banquete, ni siquiera las buenas nuevas de pasar tiempo con amigos y familia. La Navidad habla de las buenas nuevas del amor de Dios. La Biblia dice que todos estamos perdidos sin Dios: no tenemos dirección ni tampoco protección; nuestro posible impacto eterno en el mundo se verá frustrado; no tenemos un gozo real nuestra eternidad en el cielo no está asegurada. Las buenas nuevas de la Navidad son que Dios envió a Jesús a buscar y salvar a los perdidos. La Biblia dice: «Hay un Dios y un Mediador que puede reconciliar a la humanidad con Dios, y es el hombre Cristo Jesús. Él dio su vida para comprarles la libertad a todos» (1 Timoteo 2:5 NTV). Si has pasado algo de tiempo en la iglesia habrás oído muchas veces la palabra «salvación», pero quizás no sabes qué significa. Esta palabra es como un diamante: puedes observarla desde muchos ángulos distintos. • Jesús vino a rescatarnos No podemos resolver todos nuestros problemas por nosotros mismos. Sin Jesús, estamos atrapados en las expectativas de otros; estamos condicionados a vivir para la aprobación de nuestros iguales; estamos esclavizados por las adicciones. Intentamos cambiar una y otra vez, pero no tenemos el poder necesario para escapar: Jesús vino a darnos ese poder. • Jesús vino a recuperarnos Todos deseamos recuperar partes de nuestras vidas que se habían perdido. Sin Cristo anhelamos recuperar nuestra fuerza, nuestra confianza, nuestra reputación, nuestra inocencia y nuestra relación con Dios. Solo Jesús puede lograrlo. • Jesús vino para volver a conectar con nosotros Muchas personas piensan que Dios les va a regañar si vuelven a él, pero Dios no está enfadado con nadie, más bien nos quiere con locura. Jesús vino a la Tierra en la primera Navidad para reconciliarnos con Dios, para que regresase la armonía con él. Jesús vino a la Tierra para darnos el regalo de sí mismo. Muchos de nosotros celebramos su cumpleaños sin aceptar el regalo gratuito de su salvación, que sigue dentro de su envoltorio un año tras otro. ¡Eso no es muy buena idea! Fuiste creado por Dios y para Dios: tu vida no tendrá sentido hasta que lo entiendas. Esta Navidad abre el regalo más importante que jamás hayas recibido: una nueva relación con Dios por medio de Jesús.