Encontrando tu camino financieroMuestra

La fidelidad lleva a la responsabilidad.



Un buen asesor financiero no se queda el dinero que recibe de sus clientes. Lo invierte sabiamente para poder presentar a sus clientes más de lo que tenían antes. Del mismo modo, somos los responsables de invertir lo que Dios nos ha dado.



Cuando Jesús dejó la Tierra, Él puso a cada uno de nosotros al cargo de una porción de sus recursos. Jesús va a volver, y en Mateo 24, Jesús compara Su regreso con un maestro que dejó a sus siervos al cargo de su hogar. Como el maestro en la historia, Jesús nos responsabilizará por lo que se nos ha dado. Aquellos en los que Dios puede confiar para usar el dinero sabiamente les será dado más, y aquellos en los que Él no puede confiar les será dado menos. Dios no está escogiéndo favoritos. Él quiere Su riqueza usada para que tenga el mayor impacto posible antes de que Jesús vuelva.



Si un asesor financiero se queda con el dinero de sus clientes, no estará en el negocio mucho tiempo. Lo mismo pasa con nosotros. Dios acostumbra a dar más riqueza a la gente que la está usando para Su reino, no sólo para ellos mismos. Cuando somos fieles con un poco, demostramos que podemos ser fieles con mucho.



Piensa en:

1. ¿Si fueses tú propio asesor financiero, te despedirías a ti mismo? ¿Por qué o por qué no?

2. ¿De qué manera has estado siendo fiel con lo que se te ha sido dado

3. ¿De qué tres maneras puedes empezar a ser fiel con un poco en preparación para ser fiel con mucho?



Reza:

Jesús, gracias por confiarme tu riqueza. Muéstrame cómo quieres que la invierta a para que obtengas la mayor glora.