Preparados para El RaptoMuestra

Reflexión:

La oración constante nos conecta con Dios y nos mantiene alerta para el rapto. Pablo nos recuerda a alegrarnos, orar sin cesar y dar gracias en todo. La iglesia que ora está preparada para ser arrebatada antes de la tribulación, porque su comunión con Cristo fortalece su corazón y su fe. Esta preparación no es solo emocional o intelectual, es espiritual y práctica. La oración nos ayuda a discernir lo correcto, a apartarnos de toda impiedad y a vivir con un corazón expectante y agradecido.

Debemos animarnos unos a otros con estas palabras (1 Tesalonicenses 4:18), entendiendo que la esperanza del rapto no es miedo ante la ira futura, sino consuelo: Dios nos librará de la tribulación y nos llevará con Él. Mantener esta comunión diaria es fundamental para permanecer arraigados y vigilantes.

Pregunta para meditar:

¿Mi oración es constante y profunda, o solo superficial, usando la oración como un arma para prepararme y ser librado de la ira venidera?

Oración:

Padre amado, gracias por permitirme hablar contigo cada día. Ayúdame a orar sin cesar, a fortalecer mi comunión contigo y a vivir con vigilancia y santidad, esperando el rapto con esperanza. Que mi corazón esté preparado para ser arrebatado y librado de la tribulación venidera. Ayúdame a animar y fortalecer a mis hermanos en la fe, confiando en Tu promesa. En el nombre de Jesús, amén.