30 Días Con La Palabra Viva Y EficazMuestra

La voz que confronta al orgullo
Hay un lugar en el corazón donde el orgullo se esconde con elegancia. No siempre se manifiesta con arrogancia; a veces, se disfraza de autosuficiencia, de querer tener el control, de no necesitar ayuda. Y sin darnos cuenta, empezamos a vivir como si la palabra de Dios fuera una opción más, y no la voz del Rey.
Pero Dios nos ama demasiado como para dejarnos allí.
Cuando Pedro quiso impedir que Jesús hablara de la cruz, el Maestro le respondió con palabras duras pero necesarias: “¡Aléjate de mí, Satanás! (...) Tú no piensas en las cosas de Dios, sino en las de los hombres” (Marcos 8:33, NVI). Jesús no estaba rechazando a Pedro, estaba confrontando en él una lógica orgullosa que evitaba la entrega, el dolor… la voluntad del Padre.
La palabra de Dios tiene ese poder: no solo consuela, también corrige. No solo afirma, también confronta. Y cuando lo hace, no es por enojo, sino por amor. Porque no hay sanidad sin verdad, ni libertad sin arrepentimiento.
A veces abrimos la Biblia esperando una caricia, pero nos encontramos con un espejo. Una espada que no solo corta lo que nos hiere… sino también lo que nos impide crecer. ¿Doloroso? Sí. ¿Bueno? Más de lo que te imaginas.
El orgullo no se doblega con más fuerza, sino con más rendición. La Escritura no viene a golpearte, viene a humillar dulcemente tu corazón hasta que Cristo sea suficiente. Porque cuando él reina, ya no necesitas demostrar nada, ganar nada, defender nada. Solo necesitas escuchar… y obedecer.
Hoy, si la palabra de Dios te confronta, no te resistas. Ríndete. Porque esa herida no es castigo, es transformación.
Oración
Señor, gracias por amarme lo suficiente como para no dejarme igual. Si tu palabra me confronta, que lo haga para transformar. Derriba mi orgullo disfrazado de autosuficiencia, y enséñame a obedecer sin resistencia, sin demora y sin condiciones. Que hoy no huya de tu palabra, sino que corra hacia ella como quien corre a los brazos del Padre.
En el nombre de Jesús.
Amén.
Escrituras
Acerca de este Plan

¿Y si 30 días bastaran para transformar tu vida Este plan no es una lectura más: es un encuentro diario con la Palabra viva y eficaz. A lo largo de 30 días, descubrirás que la Biblia no es historia antigua, sino voz presente. Voz que rompe cadenas, sana heridas, da sentido al caos y despierta lo que estaba muerto. Prepárate para ser confrontado, consolado y encendido por la verdad de Dios. Porque cuando él habla… nada permanece igual.
More
Nos gustaría agradecer a Glorify por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: glorify-app.com/es
Planes relacionados

La Vida Cristiana Y El Carácter.

¿Es Verdad Que Dios Habla?

Gratitud Que Transforma: 3 Días Para Comenzar De Nuevo

La Sabiduría en La Respuesta

La Palabra, Vida a Tu Vida

El Rey Que Se Hizo Siervo

Devocional Del Día | Julio

Adviento: "La Anunciación" (2)

De Orilla a Orilla: Un Viaje a La Reconciliación
