Dejando Que Dios Limpie Mi Corazón De MamáMuestra

DIA 3

SALIENDO DE NUESTRAS PRISIONES

PASAJE DEL DÍA:

“Sácame de la prisión, para que alabe yo tu nombre (...) por la bondad que me has mostrado” (Salmo 142:7 NVI).

ENTENDAMOS:

Que en nuestras vidas hay cárceles -que pueden ser pensamientos compulsivos y negativos, actitudes del corazón o acciones de nuestro carácter- que nos tienen atrapadas y de las cuales sentimos que no podemos salir. Nuestra alma quedó apresada. Esas son las prisiones de las cuales Dios quiere sacarnos.

POR QUÉ ORAMOS:

Para que Dios nos revele las prisiones o cárceles que hay en nuestra vida.

Renuncie a esas prisiones y pida a Dios que la saque de allí.

Por aquellas prisiones que usted ha heredado a sus hijos. Tome un tiempo para reconocerlas, pedirle perdón a Dios y rogarle que rompa esas cadenas.

Dios mío: Tú eres omnisciente, Tú conoces y sabes todo Señor. Por tu amor te pido que me reveles las prisiones o cárceles en las cuáles estoy atrapada, que tú me las muestres mi Dios y que tu Espíritu Santo me traiga convicción de pecado. Te pido perdón por haber dejado que el pecado y el enemigo me metieran en esas prisiones. ¡Perdóname Señor! Abre las puertas de estas prisiones para que pueda salir, libera mi alma de la cárcel en que me encuentro para que pueda alabar Tu nombre. Señor perdóname porque algunas de estas prisiones se las he pasado a mis hijos, límpiame de este pecado, y rompe toda cadena de prisión en mi descendencia.