Dejando Que Dios Limpie Mi Corazón De MamáMuestra

DÍA 10

SACANDO LOS ESTORBOS DE MI ORACIÓN

PASAJE DEL DÍA:

“De igual manera, ustedes esposos, sean comprensivos en su vida conyugal, cada uno trate a su esposa con respeto, ya que como mujer es más delicada, y ambos son herederos del grato don de la vida. Así nada estorbará las oraciones de ustedes” (1 Pedro 3:7 NVI).

ENTENDAMOS:

Cuando la Palabra habla de estorbos, habla de impedimentos para que nuestra oración pueda llegar libremente hasta el Señor y sea contestada.

En este pasaje Dios le habla a los esposos, pero apliquémoslo a nuestra vida. El trato que usted da a sus hijos impide o libera su oración. Su oración no es escuchada si está maltratando a su hijo/a, si no lo ha perdonado o lo ha rechazado.

POR QUÉ ORAMOS:

Por el trato que damos a nuestros hijos. Le pedimos perdón a Dios por lo que hicimos fuera de Su voluntad.

Le preguntamos a Dios si nuestras oraciones tienen estorbo y cuál es ese estorbo. Renunciamos en el nombre de Jesús a lo que está obstaculizando nuestra oración.

Por la vida de nuestros hijos, para que Dios sane sus corazones del daño ocasionado por el maltrato y que ellos puedan perdonarnos.

Señor: Arrepentida vengo delante de ti para pedirte que tengas misericordia de mi vida y que perdones todo el maltrato que he dado a mis hijos. Señor, te confieso que con mi boca los he maltrato, les he dicho palabras que los han herido y han lastimado su autoestima. Mi falta de paciencia y mis amenazas los han violentado y te pido perdón. Te ruego que limpies todo ese daño en el corazón de mis hijos. Sana, mi Dios, todas esas heridas y restaura sus vidas. Que de ahora en adelante mis oraciones no tengan estorbo y puedan llegar hasta tu altar. Señor, libera el camino a mis oraciones para que puedan ser contestadas. Amén.