Logo de YouVersion
Ícono Búsqueda

Guía Práctica Para Orar Con PasiónMuestra

Guía Práctica Para Orar Con Pasión

DÍA 6 DE 7

MEDITA EN LA BIBLIA, CONFIESA Y ARREPIÉNTETE

Reflexión:

A diario intento dedicar al menos treinta minutos a la lectura de la Palabra y luego, a meditar en ella. Cuando me duermo por la noche, escucho la Biblia en audio en mi teléfono, empezando por el capítulo 1 de Juan. Me da una paz increíble. Leer la Biblia cada día es un trabajo duro y requiere mucho esfuerzo y disciplina. Me encanta lo que dijo el teólogo R. C. Sproul: “Fracasamos en nuestro deber de estudiar la Palabra de Dios no tanto porque sea difícil de entender, ni porque sea aburrida, sino porque es duro trabajo. Nuestro problema no es la falta de inteligencia o la falta de pasión. Nuestro problema es que somos perezosos.”

Lee la Biblia despacio. Me tomo mi tiempo para leer las Escrituras. Prefiero leer un capítulo y entenderlo que ir de prisa durante diez capítulos y no recordar lo que he leído. Lo que importa no es la rapidez con la que se termina, sino la cantidad de la Palabra que se retiene y aplica. Reflexiona sobre los pasajes que lees y sus implicaciones para tu vida. Subraya y memoriza los versículos o frases que más te llamen la atención.

Lee la Biblia en oración. Mi amigo Mart Green ha leído la Biblia durante más de 8.000 días seguidos. Él ora por cuatro cosas cada día antes de leer la Biblia. Lo llama la oración AEOI:

1. APERTURA: Salmo 119:18, “Ábreme los ojos, para que contemple las maravillas de tu ley.”

2. ENTENDIMIENTO Y 3. OBEDIENCIA: Salmo 119:34, “Dame entendimiento y obedeceré tus enseñanzas; las pondré en práctica con todo mi corazón.”

4. INTIMIDAD: Santiago 4:8, “Acérquense a Dios, y Dios se acercará a ustedes. Lávense las manos, pecadores; purifiquen su corazón, porque su lealtad está dividida entre Dios y el mundo.

Escucha la Biblia con regularidad. Las Escrituras fueron escritas para una sociedad oral. Fueron diseñadas para ser escuchadas, y siempre que fuera posible, en comunidad. Pocas personas en los tiempos de la Biblia sabían leer y escribir; la mayoría se acercaba a la Palabra de Dios escuchando su lectura en voz alta y discutiéndola. El apóstol Pablo instruyó a su discípulo Timoteo así: “...dedícate a la lectura pública de las Escrituras, y a enseñar y animar a los hermanos” (1 Timoteo 4:13).

Después de leer la Biblia, medito en ella. Algunos días medito en un capítulo o en una historia entera. Otros días solo en un versículo o frase. Piensa en lo que lees, reflexiona sobre ello y aplícalo a tu vida. Permite que la Palabra de Dios te convenza, te desafíe, te corrija, te informe, te inspire y te transforme.

Josué 1:8 explica el poder de la meditación de las Escrituras: “Recita siempre el libro de la ley y medita en él de día y de noche; cumple con cuidado todo lo que en él está escrito. Así prosperarás y tendrás éxito.” John Stott escribió: “Debemos permitir que la Palabra de Dios nos confronte, que altere nuestra seguridad, que socave nuestra complacencia y que derribe nuestros patrones de pensamiento y comportamiento.”

Mientras medito en la Palabra, también reflexiono sobre mi condición espiritual. Le pido a Dios que examine mi corazón y me revele cualquier pecado oculto. Todos los días oro el Salmo 139:23- 24: “Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce los pensamientos que me inquietan. Señálame cualquier cosa en mí que te ofenda y guíame por el camino de la vida eterna.”

Confiesa todos tus pecados, malas actitudes y estructuras mentales equivocadas que Dios te revele. 1 Juan 1:9 explica: “Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad.” Recuerda, sin embargo, que la confesión es incompleta sin arrepentimiento. No hay perdón de pecados sin arrepentimiento de pecado.

Todo cambio duradero comienza con el arrepentimiento, esto es, con un cambio en la forma de pensar. El verdadero campo de batalla está en tu mente. Toda acción comienza como un pensamiento, y nada cambiará en tu vida hasta que cambies tu forma de pensar.

Acerca de este Plan

Guía Práctica Para Orar Con Pasión

Descubre el poder de una vida de oración constante, apasionada y transformadora. Este devocional te guiará paso a paso para desarrollar una relación diaria, profunda y real con Dios. No se trata de una rutina, sino de un encuentro que lo cambia todo. Tomado del libro “Cuando oramos” por Brian Alarid.

More

Nos gustaría agradecer a World Prays por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: www.worldprays.org