No Está Bien No Estar Bien: 7 Días De Esperanza Para Tu Salud MentalMuestra

DÍA 6 – Hay esperanza incluso en la oscuridad

Reflexión:

Cuando estamos deprimidos, desarrollamos lo que se ha llamado una visión de túnel, que es como "anteojos" que limitan no solo lo que se ve, sino también cómo se piensa y se siente, haciendo que el mundo parezca más pequeño, más oscuro y sin opciones. La visión de túnel se caracteriza por enfocarse solo en lo negativo, dificultad para ver soluciones, aislamiento y falta de perspectiva.

Muchas veces hay resistencia a admitir que como hijos de Dios podamos tener problemas de salud mental, en parte debido a nuestro sistema de creencias, de que con Dios no necesitamos nada más, pues Él es suficiente para llenar todas nuestras necesidades.

Desde esa perspectiva podemos creer que estar en ansiedad y/o depresión es un signo de debilidad espiritual. Este abordaje nos ha causado mucho daño a los cristianos que sufrimos problemas de salud mental.

En la Biblia hay muchos ejemplos de hombres y mujeres de Dios que enfrentaron momentos de depresión. Si hay algo que debemos admirar de todos estos personajes es que fueron crudamente sinceros ante Dios de cómo se sentían, no se reservaron palabras para expresar su angustia ante Dios. Y la primera lección que aprendemos es que no debemos tener temor de expresar ante Dios nuestros sentimientos. Dice la Palabra que "no tenemos un Sumo Sacerdote que no pueda compadecerse de nosotros" (Hebreos 4:15). Jesús entiende todos esos pensamientos y emociones por los cuales pasamos.

Es una lucha que debemos emprender cada día, el de recordar la misericordia de Dios, pasada y presente, y no dejarse consumir por la situación actual.

Aplicación:

Empecemos un diario, en el cual cada día anotemos las cosas con las que Dios nos ha bendecido. Al hacer esto aprendemos a no quedarnos en el problema, sino ver las bendiciones que Dios nos da diariamente. El don de la vida, el ver el sol una vez más, el descanso, las relaciones personales, la medicina que cura nuestro cuerpo, todos ellos son instrumentos por los cuales Dios nos muestra su amor cada día.

Oración:

Señor, tú conoces mi corazón y el sufrimiento que estoy pasando. No entiendo las razones por las cuales estoy pasando por este mal momento y quisiera que terminara ya. Sin embargo, te conozco como Dios y Padre, y a lo largo de mi vida he visto tu misericordia y tu amor cubriéndome y bendiciéndome. Yo sé que este momento pasará y mi vida reverdecerá nuevamente, pues tú no eres un Dios que olvida a sus hijos. Contaré las bendiciones que me das cada día, y me alegraré en el único Dios que da verdadera salvación.