Devocional Septiembre "Lámpara a mis pies"Muestra

“Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen” (Juan 10:27 RVR1960).

Ser oveja de Jesús tiene características muy específicas.

No todos los que han oído de Jesús son sus ovejas.

No todos los que van a la iglesia o saben las canciones son ovejas.

1. “Mis ovejas oyen mi voz”.

A veces pensamos que lo más importante en la relación con Jesús es que le puedas contar a él cómo te sientes y ya eso te ayuda a aquietar la conciencia.

El secreto de ser una oveja de Jesús está en cuanto lo escuchas a él. Te ahorraría muchos problemas y dolores de cabeza si simplemente apagas todos los ruidos que no te dejaban escuchar su voz. El problema no es que Dios no esté hablando, el problema es que vivimos en un mundo lleno de ruidos y distracciones que no logramos escuchar su voz.

!Habla menos, escucha más! Pasa tiempo en la Palabra, el Espíritu Santo te enseñará todas las cosas y te mostrará el camino.

2. “Y yo las conozco”,

Que imagen linda, ser conocido por Jesús. Jesús sabe quien eres, Jesús conoce tu olor porque es uno que constantemente está buscando su presencia. Cuando tu vida de oración depende solo de la reunión dominical, o depende de lo que el pastor ore, realmente no estamos siendo conocidos por Jesús. El ser conocido por Él lo alcanzan aquellos que son constantes en buscar su rostro.

3. “Y me siguen” .

"Mis ovejas solo tienen una preocupación: ir en pos de mí. ¡Seguirme!".

¿En la práctica cómo puedes hoy seguir a Jesús? Hay una palabra clave y es: Obediencia. A través de tu obediencia a lo que te está diciendo puedes seguirlo todos los días.

¿Estás viviendo como la oveja de Jesús?