Sembrando Sueños De DiosMuestra

“Las condiciones nunca serán perfectas”

“Si esperas condiciones perfectas, nunca realizarás nada" (Eclesiastés ‭11:4‬ ‭NBV).‬‬

Con mi esposo queríamos casarnos cuando pudiéramos comprar una casa. Así que ahorramos y esperamos el momento ideal, pero nunca llegó. Había pasado mucho tiempo y entendíamos que teníamos que dar un paso más, y que si no lo hacíamos, nuestra relación se estancaría para siempre. Así que sin señales de una casa, pusimos fecha para casarnos y no la moveríamos por nada.

A partir de ese momento todo pasó muy rápido. Fue como si el hecho de establecer una fecha concreta hubiera abierto las puertas de los cielos que parecían haber estado cerradas hasta ese momento.

Una persona que asistía a la iglesia en la que nos congregábamos estaba vendiendo su casa y al enterarse de nuestro compromiso, ¡nos ofreció la posibilidad de comprarla en cuotas!

No podíamos creer lo que estábamos viviendo. Dios nos sorprendió y nos demostró que Él es fiel y siempre cumple sus promesas.

Hay algo que no te conté porque estaba en duda de si hacerlo o no, ya que es una decisión que con mi esposo siempre quisimos mantener en secreto. Pero no estaría siendo totalmente sincera si no te la contaría y nuestro testimonio quedaría incompleto. Es que no se puede cosechar sin antes haber sembrado.

Al principio de nuestro noviazgo habíamos ahorrado bastante y con mucho esfuerzo. Yo aún estudiaba y mis trabajos eran de pocas horas y sueldo muy bajo. Cada centavo que habíamos juntado había sido con mucho sacrificio y resignando tiempos de ocio y darnos gustos.
Estaban techando la iglesia y mi esposo, quien era mi novio en ese tiempo, sentía que teníamos que ofrendar todo. ¡Sí! Absolutamente todo. Jamás me costó dar, pero recuerdo que ese día con dolor le pregunté: “¿Todo?”, a lo que él respondió: “Sí, todo". Cuando Dios habla, no podemos negarnos, así que ese mismo día entregamos todos nuestros ahorros para finalizar la obra en la iglesia.

Por años no vimos nada, ni señales de alguna bendición económica, todas las puertas se cerraban. Pero Dios tenía planes perfectos en el tiempo perfecto, y así fue.

“A Dios sea la gloria, pues por su poder eficaz que actúa en nosotros, él puede hacer muchísimo más de lo que nos podemos imaginar o pedir" (Efesios 3:20‬ ‭NBV‬‬).

“El agua estancada se pudre”, siempre repite mi esposo , y no podría estar más de acuerdo. Es tiempo de avanzar y caminar en fe. Es tiempo de orar y establecer metas con fechas inamovibles. Es tiempo de creerle a Dios.

Oración:
Padre, entiendo que tu voluntad y tus tiempos son perfectos. Haré mi parte, me esforzaré y sembraré aunque las condiciones no sean las ideales, confiando en que la cosecha a su tiempo dará frutos. Te creo con todas mis fuerzas. Amén.