Una vida de intimidad con DiosMuestra

¿Te falta alegría?

“Aquí está mi siervo...mi elegido, con el que estoy muy contento. He puesto mi Espíritu en él...”, Isaías 42:1, PDT.

¿No te gustaría hacer feliz a Dios? Quizás te preguntes: “¿Cómo se logra?”. He aquí algunas maneras de hacer feliz a Dios:

1. Compartir el evangelio. Jesús dijo: “Se alegra Dios con sus ángeles por un pecador que se arrepiente”, Lucas 15:10 (NVI). Procurar que las personas tengan un encuentro personal con su creador hace definitivamente feliz a Dios. “Dios está cansado de mantener relaciones de larga distancia con la gente. Él anhela tener encuentros cercanos, relaciones íntimas contigo, conmigo y con todo el mundo. Él quiere invadir nuestros hogares con su presencia permanente, en tal forma que hasta un visitante sea compungido y comience a llorar y adorar en el momento en que cruce nuestra puerta”, Tommy Tenney. ¿Te avergüenzas de Jesús? ¿Saben tus compañeros de trabajo que eres cristiano? ¿Qué estás haciendo para que ellos tengan tu misma fe? Piensa en maneras creativas en las que puedas comunicar las buenas noticias del evangelio de Jesucristo. ¿Usas Internet? ¿Chateas mucho? ¿Tienes cuentas en redes sociales? Utiliza la tecnología para comunicar el evangelio. Da a conocer las buenas noticias de Jesús.

2. Obedecerlo. “Si lo hacen, Dios volverá a estar contento con ustedes, y hará que les vaya bien en todo...Dios volverá a bendecirlos como antes lo hacía con sus antepasados”, Deuteronomio 30:9 (TLA). “Dios volverá a estar contento con ustedes”. ¿Cuándo? Cuando se arrepientan, se conviertan y obedezcan a Dios: “Ahora saben las bendiciones que recibirán si obedecen a Dios, y las maldiciones que recibirán si no lo obedecen... Si ustedes se arrepienten y de nuevo deciden obedecer a Dios... Dios les tendrá compasión y los volverá a bendecir... Pero ustedes deberán arrepentirse y cumplir los mandamientos que hoy les he dado”, Deuteronomio 30:1-8 (TLA).

¿No será que la desobediencia es la razón por la que tantos cristianos no tienen alegría? Existen demasiadas personas buscando felicidad en lugares equivocados. No se han dado cuenta todavía que nada ni nadie puede darles alegría plena, sino Jesucristo. ¿Y qué pasa contigo? Dios está verdaderamente interesado en que disfrutes gozo completo: “Les he dicho esto para que tengan mi alegría y así su alegría sea completa”, Juan 15:11. ¿Te gustaría disfrutar la plenitud de gozo en el Espíritu? Ya sabes el camino. Comparte a Jesús, obedécelo de corazón.