Mata El RuidoMuestra

No todas las tormentas llegan para alterar tu vida

En el sur de California no llueve mucho. Sin embargo, cuando llueve, puede caer con fuerza y rapidez. Estas son las tormentas que deslizan mansiones multimillonarias desde un acantilado hasta el océano. Estas lluvias te dejan sin luz o inundan tu casa, arruinan conciertos y eventos. Las tormentas pueden traer la ansiedad, el estrés y el miedo.

En la vida, nos encontraremos con varias tormentas, como problemas de salud, la ruptura de una relación, la pérdida de un trabajo, problemas de negocios, la muerte de alguien cercano. Una tormenta puede ser cualquier cosa que traiga ansiedad, estrés y miedo a tu vida, algo que sacuda tu mundo. Las tormentas pueden ser duras, a veces incluso brutales. Pero no todas las tormentas vienen a perturbar nuestra vida: algunas vienen a despejar nuestro camino. Con Dios, puede haber un significado por encima de la locura del tiempo en el que te encuentras. Confía en su proceso.

En el Génesis, el primer libro de la Biblia, leemos sobre un chico llamado José. Fue a visitar a sus hermanos, que estaban cuidando a las ovejas de la familia. A los hermanos de José no les caía bien porque era el hijo menor, favorito del papá, así que lo vendieron como esclavo. Una locura, ¿verdad? José terminó en Egipto sirviendo a un funcionario rico. Justo cuando las cosas empezaban a ir bien con el nuevo trabajo de José, la esposa del funcionario se le insinuó. José la rechazó, pero fue encarcelado porque ella mintió sobre lo sucedido. Finalmente, siendo aún prisionero, fue llevado ante el Faraón porque el gobernante necesitaba saber el significado de uno de sus sueños. Se rumoraba que José tenía algunas habilidades en esa área. Con la ayuda de Dios, José le contó al Faraón el significado de su sueño y, de repente, el antiguo esclavo fue nombrado segundo al mando de todo el reino, sin más. Finalmente, pudo salvar a su familia de morir de hambre. Toda la familia de José y decenas de miles de personas habrían perdido la vida. José se lo explicó a sus hermanos, quienes lo habían traicionado, diciendo: «Ustedes se propusieron hacerme mal, pero Dios dispuso todo para bien. Él me puso en este cargo para que yo pudiera salvar la vida de muchas personas» (Génesis 50:20 NTV).

Eso se llama tener perspectiva. Es mirar tu situación a través de lo que Dios puede hacer. Si sólo miras lo que está inmediatamente frente a ti, entonces cada segundo de la tormenta va a ser agotador y súper estresante. Te arrastrará y estarás desanimado a cada paso del camino. No me malinterpretes, tener perspectiva no siempre es fácil. Aférrate a la Palabra de Dios, porque así es como escuchas su voz y entiendes las cosas de forma correcta. La Biblia es la que te ayudará a ver lo que Dios puede estar haciendo, para que puedas encontrar esperanza y paz en medio de la tormenta.

Comprometerse plenamente significa confiar en Dios pase lo que pase. Incluso cuando la vida cae en picada, mantienes tu fe en él sabiendo que está contigo. Cuando la vida se pone difícil, la gente tiende a tomar uno de estos dos caminos: o se vuelve hacia Dios o se aleja de él; o busca su ayuda y consuelo o le echa la culpa. Sea lo que sea que estés atravesando en este momento, pídele a Dios la fuerza para mantener tus ojos en él y la perspectiva para ver más allá del dolor. Eso es lo que asegurará que salgas de la tormenta más fuerte de lo que eras antes y listo para ser usado por él.