Saca provecho a la profecía Muestra

Cristo, el centro de la profecía

«Digno eres de tomar el libro y de abrir sus sellos; porque tú fuiste inmolado, y con tu sangre nos has redimido para Dios, de todo linaje y lengua y pueblo y nación; y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y reinaremos sobre la tierra. El Cordero que fue inmolado es digno de tomar el poder, las riquezas, la sabiduría, la fortaleza, la honra, la gloria y la alabanza». Wiersbe afirma: «El libro de Apocalipsis se refiere a Jesús veintiocho veces como el Cordero. La palabra griega significa corderito de la casa, un tipo de corderito que jamás quisieras ver degollado por ninguna razón. Los principales temas del Apocalipsis están todos vinculados con el Cordero. La ira de Dios es la ira del Cordero. Los santos de la tribulación son lavados en la sangre del Cordero. El relato llega a su momento culminante en las bodas del Cordero y la iglesia es la Novia, la esposa del Cordero. El trono celestial es el trono de Dios y del Cordero. Si le quitas el Cordero y la redención al libro de Apocalipsis, te quedará muy poco. Le adoramos no solamente por quién es Él, y donde está, sino también por lo que Él ha hecho por nosotros. El hecho de que fue inmolado indica que primero asumió un cuerpo humano, porque Dios como Espíritu no puede morir. Cuando adoramos al Cordero estamos dando testimonio tanto de la encarnación como de la expiación».

Uno de los excelentes resultados que derivan de una adoración auténtica a nuestro Señor Jesucristo, es que produce dentro de nuestros corazones un deseo ferviente de vivir una vida santa para Él. En 2 Pedro, se expresa de esta forma: «Puesto que todas estas cosas han de ser deshechas, ¡cómo no debéis vosotros andar en santa y piadosa manera de vivir!» 

Hablando sobre el tema de que la auténtica adoración produce conducta santa, Scofield afirmó: «Permítaseme decir aquí que no hay tal cosa como una doctrina abstracta en las Escrituras. No hay enunciado de verdad bíblica que no incluya la intención del Dios Todopoderoso de tener influencia sobre el comportamiento. Sabemos, y creemos, y esperamos que todos seremos como Él es en su venida; que le veremos como Él es, y que toda persona que tenga esta esperanza en Él se purificará a sí misma así como Él es puro».

Sí, puede haber mucho provecho al estudiar la profecía. Resuelve todo el problema de la ignorancia; aumenta nuestro conocimiento de las Escrituras, la Palabra de Dios; y nos capacita para no tener solo conceptos sino también claridad en cuanto al programa y el plan de Dios para todas las edades.