Las voces a tu alrededor no definen quién eres

Es casi imposible pasar por la adolescencia sin experimentar la presión social y en algunos casos esta presión puede provocar errores con consecuencias que a muchos hasta el día de hoy los acompañan, por ejemplo, una adicción, una enfermedad, etc.

Básicamente esto es cuando un grupo de personas alrededor tuyo te dice que eres algo que en realidad no eres y terminas buscando demostrar que se equivocan. Pero algo interesante es que el señor Jesús nunca trató de demostrarle a la multitud que querían su muerte, su gran error y, ¿por qué no lo hizo?

Pienso que cuando sabes quién eres no ocupas demostrarlo y por eso Jesús no intentó demostrarle nada a quienes lo querían crucificar. Esto nos encara y hace reflexionar que tu valor y mi valor no lo define la sociedad, ni la posición económica o los estudios; nuestro valor solo puede ser definido por Dios. Solo Él puede hablar sobre tu realidad actual y más que eso Él también puede hablar sobre tu futuro. Y si nuestro futuro está en sus manos debemos confiar porque eso quiere decir que todo va estar bien, aunque en este momento el camino adelante tal vez se vea oscuro y triste, Dios tiene un proyecto contigo y conmigo que nos va a llenar de gozo y paz.

ORACIÓN

Gracias por mi vida, un día más, tengo esta gran oportunidad de buscar tu rostro con un corazón sincero. Por favor, no permitas que las voces que buscan robarme la paz y hacerme creer que no puedo llegar a la meta que eres Tú, puedan hacer eco en mi corazón. Guarda mi mente y todo lo que soy para que el desánimo nunca se apodere de mí, ni me haga perder la línea hacia tu voluntad. Gracias, Padre Eterno. Amén.