Crisis, Te Presento a CristoMuestra

“La gratitud determina tu altitud”. Dios siempre hará más a través de ti que para ti. El Padre entregó al mundo a Su ÚNICO hijo. Luego, El Hijo entregó al Espíritu Santo. Ahora, es nuestro turno de compartir amor, compasión y empatía, cualidades semejantes a Dios. Entre más pronto te conviertas en el porrista de alguien más, más pronto atraerás tus propias promesas.

Nunca desees el “Canaán” de otra persona, sin desear la “Salida de Egipto”. Todos desean obtener o ser el producto final, pero desprecian el proceso, que puede ser agotador. Tú eres exitoso no por lo que tienes, sino por: A QUIEN tienes en tu vida (Jesús). Ser agradecido con Dios siempre capturará Su atención. Como dijo el apóstol Pablo en Filipenses 4:12 “He aprendido a estar contento en cualquier circunstancia”.

La razón por la cual deberíamos animar a los que nos rodean, incluso cuando nos encontramos en un estado roto y vacío, es porque este es un fruto de humildad. Necesitamos entender que nuestra unción no es una “Talla Única Para Todos”. Lo que Dios ha diseñado para ti está hecho a tu medida. Es por ello que David tuvo que quitarse la armadura de Saúl, porque estaba tratando de imponerse su unción. Ser agradecido por la unción que Dios nos ha dado es importante, porque es algo que nadie más tiene de la misma forma.

Tú, que estás leyendo esto, quizás no te conozca, pero permíteme decirte algo: ¡TÚ ERES SUFICIENTE!