No está bienMuestra

Si alguna vez has jugado beisbol o tienes una idea general del juego, sabes la regla única de asegurarte de golpear cuando estas al bate. Ya sea que se trate de un padre que te enseña a jugar o un entrenador de las ligas mayores, te dirán la misma cosa: "Mantén tu ojo en la bola."

Si solo fuera eso, que fácil, ¿no? Como si jugar beisbol fuera tan simple como solo mantener tu ojo en la bola, entonces sería muy fácil el beisbol. Pero eso no es tan sencillo.

Algunas veces, eso suena como cuando la gente te dice confiar a Dios tus preocupaciones y asuntos. Seguro, esosuenacomo un buen consejo. Pero solo como "mantener tu ojo en la bola" no es tan fácil como suena, "confíar en Dios" eso no es tan sencillo, tampoco. ¿Cómo hacemos para enfocarnos realmente en Jesús cuando estamos estresados?

En la Biblia, Pablo entiende que "Confiar en Jesús" no es siempre tan fácil como suena. Y en Filipenses, él realmente nos da un proceso paso a paso de cómo podría ser.

De acuerdo a él, la primera cosa que necesitamos saber cuando vamos a confiar en Dios es comenzar diciendo a Dios las cosas que nos preocupan. Cuando traemos nuestros asuntos a Dios, se nos promete una paz que es más fuerrte que todo el estrés y las preocupaciones juntas. "Confía en Dios" no es un hechizo mágico que desaparezca todo, pero es un primer paso para sobrepasar nuestras preocupaciones.