Santiago: Versículo Por Versículo Un Plan De Estudio De 10 DíasMuestra

Cómo responder a la injusticia

La Biblia dice que la riqueza no es ni buena, ni mala. Pero la riqueza muchas veces promueve y expone pecados como el descontento, la codicia, la ambición egoísta, la glotonería y la idolatría.(10)

Pensemos cuántas palabras ásperas y acciones airadas están relacionadas con tener demasiado, o no tener suficiente dinero, ropa y alimento. Santiago advierte que quienes idolatran (se identifican con) la riqueza, al final, verán destruirse los objetos que tanto aman y adoran.

Santiago ya ha condenado el favoritismo hacia los ricos. Ha mencionado que los ricos, muchas veces, explotaban a los cristianos. Aquí, sus palabras sobre los impíos y su riqueza son tan contundentes como las de cualquier profeta del Antiguo Testamento. La Palabra de Dios condena el uso y la persecución de la riqueza que implica pasar por alto o, aun, oprimir a los menos favorecidos.

Santiago dice que, aunque el juicio aún no ha comenzado, el día en que deberán rendir cuentas se acerca inexorablemente. El pecado ofende a Dios. Él sabe lo que sucede, y juzgará de manera perfecta la injusticia con Su justicia. Observemos lo que Dios juzga como malo:

• Los salarios no pagados. Se refiere a quienes explotan a sus trabajadores, no les pagan lo justo o se niegan a pagarles.
• Lujo y placer desenfrenado. Se refiere a quienes usan todo para su placer y se niegan a ayudar a los menos favorecidos.
• La corrupción. Se refiere a quienes ganan victimizando a otros en sistemas socioeconómicos, legales o gubernamentales.

Los cristianos son llamados a confrontar rectamente la injusticia. Pero, ¿qué diremos de los cristianos desamparados, oprimidos o necesitados del mundo? Santiago tiene dos llamados a la acción para ellos: ser pacientes y orar.

Paciencia – 5:7-12

Santiago insta a los creyentes a perseverar cuando se encuentran en pruebas de injusticia. No dice que tengan paciencia porque es lo único que pueden hacer los pobres. Tampoco sugiere que los ricos vayan a tratarlos mejor por ser pacientes. Santiago hace énfasis en la justicia que Dios ha prometido hacer. Y presenta la ilustración de un agricultor que espera las lluvias y las cosechas. Recordemos que el Señor Jesucristo, Su Hijo, regresará con perfecta justicia para levantar una cosecha de rectitud.

Santiago también habla de que Dios juzgará a los cristianos. Algunos tropiezan y se excusan culpando a los ricos. Estos condenan a los ricos precisamente por los pecados que tienen en común con ellos: codicia, avaricia y lujuria. Dios, el perfecto Juez, examinará tanto a los impíos como a Sus propios hijos. Los cristianos no serán condenados, pero sufrirán pérdida en su recompensa.

La paciencia suele tomarse como algo enteramente pasivo. Pero la paciencia por la causa de Cristo requiere que los creyentes permanezcan firmes. Actuar con paciencia es fructificar por el Espíritu Santo. Él permite que los creyentes se aferren a la verdad y se mantengan firmes bajo la opresión para dar testimonio del evangelio. El mandato de Santiago, de mantenerse firmes, significa actuar como los profetas que él nos recuerda. También hace referencia a Job, el clásico ejemplo bíblico de perseverancia.

Oración – 5:13-20

Dios escucha las oraciones de los justos. Las oraciones de quienes se acercan a Dios son poderosas y eficaces. Esto no significa que recibiremos todo lo que pidamos. Santiago ya nos ha enseñado a pedir correctamente. Esto significa buscar persistentemente ser conformados a la voluntad de Dios en toda circunstancia.

El v. 14 habla de ungir a los enfermos con aceite. Este versículo es malinterpretado por algunos como una garantía de sanidad para los cristianos en toda circunstancia. Sí, Dios otorga sanidades espectaculares, pero no encontramos en ningún lugar de la Biblia que Él prometa salud en este mundo para todos los creyentes. En contexto, Santiago está escribiendo sobre la oración. La vida comunitaria fiel y ferviente, junto con el hábito de brindar atención a los demás, y la oración, sirven a la voluntad de Dios. Santiago ya ha hablado de que ofrecer una oración o una bendición sin suplir las necesidades físicas constituye falsa fe. (11)

Los comentarios finales de Santiago resumen el propósito que tuvo al escribir esta carta tan práctica y desafiante. Dios inspiró a Santiago para que confrontara a los que se apartaban de la fe auténtica. Por medio de Santiago, Dios interviene de manera urgente y amorosa. Santiago tiene fe en la fe que Dios ha dado a los creyentes. Confía en que ellos no solo oirán estas palabras, sino también las tomarán en serio y las vivirán en la práctica. Superamos las presiones del mundo, el mal y nuestra vieja naturaleza, que compiten entre sí, colaborando con el Espíritu Santo que produce la transformación interior. A medida que los creyentes asimilan la Palabra de Dios y permanecen en comunión con Él y Su pueblo, trabajan en fe para vivir en la práctica la buena, agradable y perfecta voluntad divina.

Preguntas

P11. ¿Cómo abusan o usan mal las personas los privilegios hoy?

P12. ¿Cómo deben vivir los cristianos mientras esperan el regreso de Jesús? ¿Cómo Te animan o desafían los ejemplos en este pasaje?

P13. ¿Qué lecciones aprendes sobre la oración en este pasaje? ¿Cómo las pondrá en práctica?

Versos Relacionados

10: El amor al dinero: 1 Timoteo 6:10

11: Oraciones y obras: Santiago 2:16