7 señales de caminar en el Espíritu SantoMuestra

Paga el precio de la perseverancia en la búsqueda de Dios. 

Saúl empezó bien, pero no pagó el precio de permanecer fiel a ese rumbo. Espera en el Señor, porque ese fue el primer gran error de Saúl. Él no esperó a Samuel, se adelantó a su líder espiritual. Como consecuencia, Dios llegó y le dijo que no podía continuar como rey porque no esperó. Dios encontró a alguien mejor, no un mejor líder, mejor guerrero, o incluso un mejor rey, sino una mejor persona. ¿Qué era mucho mejor sobre este hombre a quien Dios encontró para reemplazar a Saúl? 

Dios encontró a alguien que “busca Su corazón”. Saúl no buscaba a Dios. No es que el pecado de Saúl fuera enorme, sino que su deseo por Dios era escaso. Lo que califica a David para el reino era que buscaba el corazón de Dios. David no era perfecto; era apasionado. Perseguía a Dios; no era pasivo. 

La pasión debe complementarse con la persistencia para que seamos contantes. Permanece en el rumbo. Mantén fielmente tu tiempo con Dios. No intercambies esa preciosa comunión por cualquier cosa. 

Oremos juntos. 

Espíritu Santo, continuamos descansando en Tus preciosos brazos.