Discípulos del Reino con Tony EvansMuestra

El individuo y la familia 

El llamado a ser un discípulo del reino afecta nuestras vidas en los cuatro terrenos del reino de Dios. Hoy consideraremos los primeros dos, nuestra vida individual y familiar. 

No fui criado con dinero. Fui criado en una casa pequeña, en una comunidad urbana

en Baltimore, donde mis padres apenas podían sobrevivir. Muchos de ustedes conocen la historia porque también lo han vivido. A veces, mi mamá tenía que encontrar la forma de cocinar el pescado que mi padre había traído, para hacer el desayuno, el almuerzo, la cena y el postre. Pero a pesar de esta realidad, nunca me fui a la cama preocupado. La carga de la vida no me aplastó. La razón por la que nunca luché con las cargas de la vida siendo un niño era porque no eran mi problema. Era el problema de mis padres. Los dejé a ellos preocuparse. 

Por eso, si tendríamos comida al siguiente día nunca fue mi preocupación. Cuando mi padre fue despedido como cargador, y estuvo sin trabajo por varias semanas, no me estresé. Confié en quienes eran responsables de ocuparse de nosotros. Podía descansar porque confiaba en mis padres y tenía una dependencia consciente de ellos. 

Ahora, como adulto, sin embargo, entiendo que las cargas de la vida pueden aplastar a la gente. He tenido esa experiencia yo mismo, al ser un joven con cuatro hijos, una esposa, y el desafío de balancear estudios de tiempo completo y proveer a mi familia. Aun a pesar todo el estrés que cargamos cuando nos convertimos en adultos, Jesús dice que si simplemente crecemos en el discipulado como individuos y familias, podemos descansar. Podemos experimentar uno de los más grandes beneficios de pertenecerle: tener paz. 

La solución a las cargas de la vida no se encuentra en tus conocimientos, éxito o entendimiento. Como un discípulo verdadero del reino, accedes a la cobertura del Padre y a la sabiduría que Él imparte mientras vives bajo su señoría y en una relación duradera con Él. Su cobertura y sabiduría transformarán radicalmente tu vida y te dará todo lo que necesitas para vivir abundante y victoriosamente con la autoridad del reino.