Ruge como un león: ¡Sé valiente y prepárate para rugir!Ukázka

ASUSTADO Y VALIENTE

Muchas veces puedes evitar los problemas si tomas buenas decisiones. Por ejemplo, si dices la verdad no te meterás en problemas por mentir. Si mantienes tus ojos en tu propio examen nadie pensará que eres tramposo. Si eres amable y servicial no te meterás en problemas por ser descortés.

Pero hay ciertos problemas que no podemos evitar, a pesar de lo buenas que sean nuestras decisiones, como, por ejemplo: enfermarnos, escuchar a nuestros padres discutir o perder a alguien que amamos. Nadie elige que cosas así le sucedan, pero a veces simplemente pasan. Cuando llegan los problemas puede resultarnos aterrador. Y está bien tener miedo. Pero no tienes que quedarte atrapado por él. Puedes estar asustado y ser valiente al mismo tiempo. ¿Cómo? Acudiendo a Dios en oración.

Él nunca tiene miedo, y siempre está dispuesto a ayudarnos. Dios comienza a contestar tus oraciones incluso antes de que termines de orar (Isaías 65:24). Y Él nunca te abandonará para que tengas que abrirte camino solo en medio de una jungla de problemas. Tampoco se quedará parado a tu lado para verte luchar. No, Él irá delante de ti y comenzará a luchar por ti. Despejará el camino y se asegurará de que tengas todo lo necesario para llegar al otro lado. La próxima vez que te encuentres en problemas llama a Dios, y luego observa cómo te responde.

Oración:

Dios, gracias por escucharme y responderme siempre. Confío en que siempre lucharás por mí. Amén.