Contrastes. El Corazón Del CreativoMuestra

Comunicar el evangelio vs. diluir el mensaje
así es también la palabra que sale de mi boca: No volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo deseo y cumplirá con mis propósitos"
Isaías 55:11 NVI.
¿Sabes cuántas personas han arriesgado y perdido la vida por predicar el Mensaje de Jesús? Desde los primeros apóstoles hasta misioneros en países donde la fe es perseguida, millones han dado todo por mantener intacta la Palabra. Hechos 7 nos recuerda el sacrificio de Esteban, apedreado por proclamar la verdad. Datos recientes muestran que en varias naciones, cientos de cristianos son perseguidos cada día simplemente por anunciar el evangelio. No es un mensaje cualquiera; es vida y salvación.
En la era digital, estar en tendencia no es pecado, pero reemplazar la verdad con popularidad sí lo es. Muchas veces compartimos conferencias llenas de frases motivadoras y emociones, pero ¿qué queda de la Palabra misma si quitamos la voz de Dios? Mateo 5:18 (NVI) nos dice: “Les aseguro que mientras existan el cielo y la tierra, ni una letra ni una tilde de la Ley desaparecerán hasta que todo se haya cumplido". La Palabra es firme, eterna y no necesita adornos.
Hoy es fácil publicar lo que nos inspira, lo que nos emociona, o lo que nos motiva, pero el verdadero reto es: ¿Cuánto de ese contenido proviene directamente de la Biblia y no de un influencer cristiano? Como creativos, debemos preguntarnos si estamos transmitiendo la voz de Dios o solo ecos de voces humanas. 2 Timoteo 4:2 nos llama: “Predica la palabra; persiste en hacerlo, sea o no sea oportuno; corrige, reprende y anima con mucha paciencia, sin dejar de enseñar".
Diluir el mensaje puede parecer inofensivo, pero tiene consecuencias profundas. Cuando se suaviza la verdad para “gustar” al público, la esencia del evangelio se pierde. Efesios 6:19-20 nos recuerda que nuestra misión es declarar valientemente el misterio de Cristo, no disfrazarlo para agradar. El peligro de un mensaje diluido es que confunde, engaña y puede dejar a las personas sin dirección espiritual verdadera.
Las personas necesitan escuchar la Palabra sin maquillaje ni filtros. Necesitan confrontación con la verdad, no solo palabras que suenen bonitas o inspiradoras. Jeremías 23:29 nos dice que la Palabra de Dios es como fuego y martillo: no viene a suavizar, sino a transformar. Como creativos, nuestro rol es ser canal de esa fuerza que cambia vidas, no solo de frases motivadoras pasajeras.
Entonces, ¿cómo usar el arte para amplificar la Palabra sin perder su verdad? Cada diseño, video, fotografía o contenido puede ser una plataforma para reflejar lo que Dios dijo. La clave está en inspirarse en la Escritura, no en la opinión popular; en dejar que el Espíritu Santo guíe la creatividad; y en recordar que el arte sirve como puente para llevar la luz de Dios a quienes aún no la conocen.
Hoy tienes la oportunidad de decidir: ¿Serás parte de la tendencia que diluye, o del movimiento que declara la verdad sin compromisos? Tu creatividad puede ser un faro que lleva el evangelio intacto a nuevas generaciones. Haz que tu arte sea fiel a Dios y verás cómo su Palabra nunca regresa vacía, sino transformando vidas.
Acerca de este Plan

En este devocional descubrirás uno de los contrastes más profundos con los que todo creativo se enfrenta: la lucha interna entre el ser espiritual y el ser carnal. Cada día decidimos a cuál de los dos alimentar. Si nutres a tu creativo espiritual, tu obra reflejará la esencia de Cristo; si alimentas al carnal, el ego terminará tomando el control. Este devocional es una exhortación a ser menos como nosotros y más como Jesús, un llamado a crear desde la verdad y no desde el orgullo.
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Nos gustaría agradecer a Departamento Creativo en la Iglesia por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: www.instagram.com/departamentocreativo1









