Cristo, Nuestra Roca FirmeMuestra

Nuestra esperanza viva en la salvación.

Mi esperanza se basa en nada menos que la sangre y la justicia de Jesús. No me atrevo a confiar en el marco más dulce, Sino que me apoyo completamente en el nombre de Jesús. En Cristo, la roca sólida, me mantengo firme. Todo otro terreno es arena movediza.

1 Pedro comienza con alabanza, ¡qué gran manera de empezar! Alabado sea Dios por nuestro nuevo nacimiento a una esperanza viva (v. 3). Pedro sienta las bases de su carta centrando a sus lectores en la fuente de esta esperanza viva: la resurrección de Jesús. La esperanza no está muerta y enterrada en una tumba, sino viva en Jesús. Sobre este fundamento deben construir sus vidas. Gracias a esta esperanza viva, pueden soportar los sufrimientos que están experimentando. Deben levantar la vista para ver el resultado final: la salvación de sus almas (v. 9). Hay seguridad eterna incluso en los momentos difíciles. ¡Alégrense!

Reflexionen

¿Qué hay en esta esperanza viva que nos anima a vivir bien hoy?

Oración

• Alabemos juntos a Dios por el don de la salvación y nuestra seguridad eterna.
• Oremos por aquellos que se sienten inseguros e incertos. Puede ser un niño, un joven o una familia. Oremos por oportunidades para compartir con ellos nuestra esperanza viva en Jesús.