Hallando paz y gozo en las tormentasMuestra

DÍA 3.
Lectura: Hebreos 12:26-28
¿Alguna vez has sentido que tu mundo se sacude? Puede que no estés en una temporada tan dura, pero creo que todos en algún momento hemos sentido que nuestro mundo se mueve: perdemos empleos, fallecen seres queridos, alguna enfermedad golpea nuestra puerta.
Todos en algún momento, y de alguna forma, vemos cómo cosas importantes para nosotros son movidas; sin embargo, podemos confiar en una cosa: Dios solo permitirá que se muevan las cosas que pueden ser movidas.
Hebreos 12:28 nos habla de que se nos ha dado ¡un reino inconmovible! Un reino que no se puede mover, que es eterno, que no es inestable y que nunca deja de ser. Estas son esas cosas invisibles en el Señor. (2 Corintios 4:18). Su bondad, su gracia, su paz que sobrepasa todo entendimiento, su amor por nosotros, la vida eterna en Cristo Jesús, el hecho de que Dios es Dios soberano, Todopoderoso; sus misericordias, y mucho más. Estas cosas invisibles son eternas.
La promesa de vida eterna en Cristo Jesús es inconmovible. La gloria venidera es inconmovible. El hecho de que un día estaremos en su presencia, donde no habrá más llanto, ni dolor, ni enfermedad (Apocalipsis 21:4). Eso es inconmovible.
Ciertamente en este mundo tendremos aflicciones, pero no temas, porque Él ha vencido al mundo (Juan 16:33) y todas estas dolencias de este mundo son pasajeras, pero la vida en Cristo es eterna cuando le hemos aceptado en nuestro corazón y lo hemos confesado como nuestro Señor y salvador.
¿Crees esto? Si es así, ¡me alegra tanto! Porque tenemos entonces también una razón de gozo inconmovible.
Puede que el mundo a tu alrededor parezca estar cayéndose, pero Dios sostiene tu mundo, Él venció la muerte y ahora nosotros también podemos caminar en esa vida abundante en Cristo Jesús.
Entonces, como continúa diciendo Hebreos 12:28, “tengamos gratitud”. ¿Acaso no es motivo de ello? ¡Cómo no estar agradecidos! Alabamos al Señor por este gran regalo dado por gracia. Que esta gratitud nos mueva a postrar nuestra vida en adoración y servirle. ¡Es también tiempo de dar a conocer a otros este gran tesoro! Sí, aún en medio de tu aflicción, “mediante ella (esta gratitud) sirvamos al Señor, agradándole con temor y reverencia”. Hebreos 12:28
Te invito a que hoy pongas tus ojos en Jesús, el autor y consumador de nuestra fe, que como leíamos ayer en Filipenses, pienses en todo lo amable, todo lo digno de alabanza, y entre eso evidentemente se encuentra quien es nuestro Dios, aquel que silencia los vientos y calma tormentas.
Dios nos da una paz diferente, una paz no como el mundo la da. Hoy disfruta de ella al entregar una y otra vez tus peticiones delante de Él en oración, confiando en sus promesas y el reino inconmovible que nos ha sido dado ¡Y dando gracias! Gracias por su amor y por todo lo que ha hecho por nosotros, por su gracia, que es más que suficiente para atravesar cualquier dificultad (2 Corintios 12:9).
La esperanza viva en Cristo Jesús nos llena de gozo en medio de cualquier dificultad.
ORACIÓN:
¡Gracias, Señor, porque por gracia me has dado un reino inconmovible! Gracias porque me has hecho tu hijo/a y hoy disfruto de los beneficios de ese reino en mi vida, de tu reino. Gracias porque puedo descansar en tu promesa de vida eterna y en que aunque en este mundo muchas cosas se muevan y se vayan, tú eres fiel e inconmovible. Gracias porque tú nunca cambias. Confío y descanso en ti, Señor. En el nombre de Jesús, amén.
Acerca de este Plan

Estudiemos juntos durante 3 días pasajes clave de la Biblia que nos ayudarán a transitar con gozo y paz las dificultades de la vida, por supuesto, anclados en Cristo Jesús, nuestra esperanza viva.
More
Nos gustaría agradecer a Gabriela Sofía Jaramillo por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: selahbd.wixsite.com/home/devocionales









