Atesorando Sabiduría - La fortuna de escuchar a DiosMuestra

Verdad

El capítulo 19 nos muestra el poder del evangelio para buscar y salvar lo que se había perdido. La historia de Zaqueo es un ejemplo perfecto: este jefe de los publicanos, odiado y marginado, tiene un encuentro con Jesús que transforma su vida radicalmente, llevándolo a una restitución gozosa. Jesús resume su misión con las palabras: "el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido". El capítulo culmina con la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén, donde es aclamado como Rey, pero Él llora sobre la ciudad, lamentando su ceguera espiritual.

Equipamiento

Este pasaje nos equipa para responder al encuentro con Jesús con un arrepentimiento gozoso y práctico. Nos inspira la historia de Zaqueo, mostrándonos que nadie está demasiado "perdido" para ser encontrado por Jesús. Nos forma para entender que la verdadera salvación siempre produce un cambio de vida visible y un deseo de reparar el daño que hemos causado.

Al Corazón

¿Mi vida refleja la de alguien que ha sido verdaderamente alcanzado y transformado por la gracia de Jesús, como Zaqueo?

¿Estoy siendo un buen mayordomo de los dones, el tiempo y los recursos que el Señor me ha confiado mientras espero su regreso?

Misión

Hoy, tu misión es buscar lo que se ha perdido. Primero, agradece a nuestro Padre que Jesús te buscó y te salvó a ti. Segundo, únete a Su misión. Ora por una persona "perdida" que conozcas. Luego, como Jesús, da un paso para acercarte a esa persona, no con juicio, sino con una invitación o un acto de amor que le muestre que es buscada por Dios.