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Día 2: El poder de la influencia

¡Hola, superpoderosas!

En el día de hoy, vamos a hablar de un tema que está por todas partes: la influencia. En un mundo donde todos quieren ser "influencers" en las redes sociales, es fundamental que nos detengamos a pensar: ¿qué o quién nos está influenciando? Y, más importante aún, ¿qué clase de influencia estamos dejando en los que nos rodean?

Jesús, nuestro gran influencer

Hoy, quiero presentarte al mejor influencer de todos los tiempos: Jesús. Aunque no tuvo redes sociales, Él movió a multitudes. Su impacto no solo se sintió en Su tiempo, sino que ha perdurado por más de dos mil años y trascenderá a todas las generaciones.

A Jesús lo seguían personas de todas las clases sociales: los que buscaban sanidad y esperanza, y también sus detractores, que intentaban ponerle a prueba. Su fama crecía porque Sus palabras no eran vacías; Él predicaba el evangelio del Reino, sanaba a los enfermos y traía liberación a los oprimidos.

Jesús tenía un "contenido" único y revolucionario. No se ajustaba a las normas de su época. Se rodeaba de personas no convencionales para que hicieran parte de su grupo de discípulos: pescadores, recaudadores de impuestos y mujeres. Su equipo de trabajo no era el más "profesional" del mundo, pero a ellos les dio el poder para transformar la historia. Jesús nos enseñó que la influencia verdadera no se basa en el estatus o la popularidad, sino en una relación genuina con el Padre. Su secreto no era la fama, sino su búsqueda íntima con Dios. Él se levantaba muy de mañana para orar porque sabía que su poder venía de esa conexión.

Conviértete en una influencer

Jesús nos invita a ser como Él. Su llamado es claro: "Sígueme". Este es un llamado a la rendición total, a morir a nuestras viejas costumbres, a dejar de pensar que "somos así y así nos quedamos". Es una invitación a dejar que Su poder se perfeccione en nuestra debilidad.

Entonces, ¿por qué Jesús quiere que lo sigamos? Para que nosotras seamos luz. Él quiere que otros puedan conocerle a través de nuestras vidas, que seamos ese reflejo de Su amor, gracia y verdad.

¿Cuál es tu contenido?

Como Gestor de redes sociales o "Community Manager" de Jesús en tu hogar y en tu entorno, tu contenido principal debe ser Jesús mismo. Tu rol es el mismo que el de Juan el Bautista: no buscaba el protagonismo, no hablaba de sí mismo, sino que preparaba el camino y señalaba a Jesús. Su único objetivo era dirigir a la gente hacia la Luz.

Tú eres el contenido: Sal y Luz de la Tierra

Jesús nos dio un mensaje claro: "Vosotros sois la sal de la tierra (...) Vosotros sois la luz del mundo" (Mateo 5:13-14 RVR1960). Él nos está diciendo que nuestra vida, en su esencia, debe ser la influencia.

· Sé la Sal: En tiempos bíblicos, la sal se usaba para dar sabor, preservar y purificar. Como mujeres, estamos llamadas a darle sabor a este mundo, ayudando a otros a encontrar el propósito y sentido que solo se encuentra en Dios. Si perdemos nuestro "sabor", si permitimos que el pecado sea normal en nuestras vidas, perdemos nuestro poder de influencia.

· Sé la Luz: El mundo está lleno de tinieblas. Jesús nos dice que nuestra vida no debe esconderse. Como una luz sobre un candelero, nuestras acciones deben ser vistas e iluminar a quienes nos rodean. Tus acciones, tu integridad y tu forma de vivir deben ser un reflejo de Cristo.

Para ser sal y luz, necesitamos una relación íntima y personal con Dios. Jesús nos dice que "todos serán salados con fuego", lo que significa que el refinamiento y la purificación vienen a través de las pruebas. Es en esos momentos que nuestra fe se vuelve más fuerte y nuestra luz brilla con más intensidad.

Hoy, te animo a orar y pedirle a Dios que active en ti ese poder de influencia, para que tu vida glorifique y honre a Dios en cada lugar donde estés.