Obtener la app¿Está Cristo Dividido?Muestra
Dios da el crecimiento
“Yo planté, Apolos regó; pero el crecimiento lo ha dado Dios” (1 Corintios 3:6 RVR1960).
Los siervos plantan, riegan y sirven, pero sólo Dios hace florecer la vida.
Pablo corrige una visión errada del liderazgo espiritual. Los creyentes corintios, siendo niños en Cristo, estaban divididos por lealtades humanas: Yo soy de Pablo, yo de Apolos (v.4). Pablo responde con claridad: los líderes son colaboradores, no competidores; son servidores, no ídolos.
Cada uno cumple una función en el Reino, pero el fruto depende exclusivamente de Dios. Esta verdad nos libera del orgullo y de la desesperación. Ni la autosuficiencia ni la comparación tienen cabida cuando entendemos que el crecimiento espiritual viene de lo alto (Juan 15:5).
El reconocimiento humano es efímero. Lo importante es ser hallado fiel por Aquel que da el crecimiento. En lugar de buscar protagonismo, debemos procurar ser instrumentos útiles en manos del Señor.
¿Estoy más enfocado en el reconocimiento de los hombres o en ser fiel al llamado que Dios me ha dado?
Escrituras
Acerca de este Plan
Somos edificados para la gloria de Dios. El anhelo de Dios es que seas confrontado, animado y guiado a vivir como un obrero fiel, consciente de que eres templo de Dios y llamado a reflejar Su gloria. Nuestra referencia en la vida cristiana siempre debe ser Cristo, y no ningún líder o maestro cristiano, por muy grande que haya sido su aporte en nuestra vida. El crecimiento espiritual, la unidad en Cristo, la responsabilidad en la edificación de la Iglesia y la santidad del cuerpo de Cristo son fundamentos esenciales para una vida cristiana madura.
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Nos gustaría agradecer a Arnoldo Arana por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: vidaefectiva.com
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