Orgullo. El Gran Pecado.Muestra

El orgullo separa a las personas.

"Las mujeres cantaban mientras tocaban, y decían: «Saúl ha matado a sus miles, y David a sus diez miles». Entonces Saúl se enfureció, pues este dicho le desagradó, y dijo: «Han atribuido a David diez miles, pero a mí me han atribuido miles. ¿Y qué más le falta sino el reino?»" (1 Samuel 18:7,8 NBLA).

Ayer vimos que el orgullo se basa en comparar tu estatus o logros con los de otras personas. Esto significa que otras personas exitosas amenazan tu autoestima. Esto crea separación o incluso hostilidad.

Vemos esto con el rey Saúl, por ejemplo. Tenía éxito política y militarmente. Pero luego David se unió a él y demostró ser aún más exitoso. Esto hizo que Saúl se llenara de celos. Sus éxitos ya no contaban. Solo tenía ojos para su "riva". Aunque David logró victorias para Israel (y, por ende, para Saúl), Saúl consideraba a David cada vez más como un enemigo. No porque David hiciera algo mal, sino porque superaba a Saúl mismo. El corazón orgulloso de Saúl no podía soportar eso. Incluso llegó a intentar matar a David.

Cuando éste huyó, Saúl reunió a un grupo de soldados para darle caza y matarlo. Solo gracias a la protección de Dios, David sobrevivió a esta cacería que duró años. Una actitud orgullosa separa a las personas.

En última instancia, el orgullo hace que una persona se sienta sola porque desea estar en la cima y aliena a los demás. ¿Reconoces esto en tu entorno? ¿Quizás incluso en ti mismo?