Mi Identidad en CristoMuestra

Soy amado

En un mundo donde el amor a menudo es más condicional y efímero, nosotros, como hijos de Dios, tenemos el privilegio de conocer que es un amor incondicional, eterno e inmenso ese es el amor que Dios nos ofrece a cada uno de nosotros.

Al aceptar este amor y recibir consigo una nueva identidad recibimos tres características:

1. Un valor incalculable: A través de su amor Dios nos muestra que somos valiosos y dignos de ser amados. Somos su creación, sus hijos e hijas. Nos valora tanto que dio su vida por cada uno de nosotros y si fuese necesario volverlo a hacer, estoy más que seguro que lo hiciera de nuevo. Así que ya no te creas esa mentira que no vales nada sino recuerda siempre esto el creador de todo te ama y valora y con eso basta.
2. Seguridad y protección: El amor de Dios es un refugio seguro en medio de las tormentas de la vida. Eso quiere decir que nunca estaremos solos, siempre estaremos acompañados de Él, guiados por Él y la victoria la tendremos segura porque Dios es un Dios vencedor.
3. Transformación: El amor de Dios tiene el poder de transformarnos de adentro hacia afuera. Puede liberarnos de cualquier atadura, tentación, miedo, inseguridad y renovar nuestro ser y convertir todo en gozo y paz, y también nos capacita a amar a los demás como él nos ama.

Que esta verdad sea el fundamento de tu vida, y que cada día vivas en la certeza de que eres amado por Dios.

Teniendo en cuenta todo esto te invito a que este día te sumerjas en el amor de cristo y anotes en el transcurso de la semana aspectos donde viste el amor de Dios en tu vida.