Conociendo a DiosMuestra

En Juan 14:6-7 “Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto.”

La máxima revelación de Dios a la humanidad se encuentra en la persona de Jesucristo. Si alguna vez te has preguntado cómo es Dios, qué siente, cómo piensa o cómo actúa, la respuesta está en mirar a Jesús. Él es el rostro visible del Dios invisible (Colosenses 1:15). Conocer a Jesús no es solo conocer acerca de Dios, es tener un encuentro personal con Él mismo. Hoy entenderemos que no hay conocimiento verdadero de Dios sin un encuentro íntimo y transformador con Jesús.

Felipe y la petición de ver al Padre

En Juan 14, durante la última cena, Jesús habla con sus discípulos sobre su partida inminente. Felipe, lleno de sinceridad, hace una petición: “Señor, muéstranos al Padre, y nos basta” (Juan 14:8).

La respuesta de Jesús revela una verdad impresionante: "¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre" (Juan 14:9).

Querido lector, en Jesús vemos la compasión de Dios, su paciencia, su justicia, su poder, su amor incondicional. Todo lo que anhelamos saber de Dios, lo encontramos plenamente revelado en Cristo.

La pregunta final entonces sería: ¿Por qué Jesús es esencial para conocer a Dios?

• Jesús es el único camino: No hay múltiples caminos hacia Dios; hay uno solo: Jesús. No es suficiente creer en un “ser supremo” de forma genérica. Debemos conocer y creer en Jesucristo como el Hijo de Dios y Salvador.
• Jesús revela el corazón del Padre: A través de sus acciones, palabras y sacrificio, Jesús nos muestra que Dios no es un tirano distante, sino un Padre amoroso que desea reconciliarnos consigo.
• Jesús abre el acceso directo al Padre: Antes de Cristo, el acceso a Dios era limitado a través de sacerdotes y sacrificios. En Cristo, podemos acercarnos confiadamente al trono de la gracia (Hebreos 4:16).

Y ¿Cómo puedo conocer más a Jesús hoy? Tal vez sería tu reacción a la pregunta incial:

Y la mejor forma es leer los Evangelios con un corazón abierto: Mateo, Marcos, Lucas y Juan no son solo relatos históricos; son ventanas vivas hacia el corazón de Jesús. Léelos pidiéndole al Espíritu Santo que te muestre quién es Él.

Recuerda, conocer a Dios es una aventura que no termina jamás. Cada etapa de la vida ofrece nuevas oportunidades para descubrir más de su amor, su carácter y su propósito para nosotros. Dios no se esconde de ti; Él te llama a una relación íntima, profunda y transformadora.

¡Responde a su llamado! Búscalo de todo tu corazón… y lo encontrarás! (Jeremías 29:13).