Afilando mi espadaMuestra

¡Qué emocionante la lectura de Isaías 40! No solamente hemos encontrado que Juan el Bautista tenía la misión de preparar el camino a nuestro Señor Jesús, preparar el camino para que todo lo torcido se enderece y lo áspero se allane a través de la obra redentora de Jesús.

Es emocionante encontrar también en Isaías 40 la descripción del incomparable Dios de Israel, ya que nuevamente se nos da testimonio de su poder creador y nos hace reflexionar con esta pregunta tan poderosa: ¿No has sabido, no has oído que el Dios eterno es Jehová, el cual creó los confines de la tierra?

Da gracias a Dios que tú sí has sabido, que tú sí has escuchado acerca de ese Dios eterno y que da promesa a aquellos que en Él esperan, que sus fuerzas serán renovadas, que correrán y no se cansarán.

Todo esto te invita a que tú también des testimonio de la grandeza de Dios en tu vida, que la compartas a otros y que disfrutemos juntos del gozo de la salvación.