META #1: ESTAR CON JESUS

No es sorprendente que Jesús comenzara la formación de sus aprendices simplemente diciéndoles “vengan, síganme”, para que caminaran junto a Él en el Camino.

Invitó a Andrés y a su amigo a que vinieran y vieran donde se estaba quedando.“Ellos fueron, pues, y vieron dónde se hospedaba. Ese mismo día se quedaron con Èl.” (Juan 1:39).

En Lucas 10:39, leemos acerca de una aprendiz llamada María “que, sentada a los pies del Señor, escuchaba lo que Él decía”.

Según Marcos 3:13, Jesús “llamó” a sus discípulos y “ellos vinieron a Él”. Este habría sido un grupo de docenas o incluso cientos de seguidores que pasaron largos períodos de tiempo con Jesús. De este gran grupo de discípulos, Jesús eligió a 12 para darles una capacitación especial y que "pudieran estar con Él”.

Este es el primer y más importante objetivo de los aprendices de Jesús: estar con Él, pasar cada momento consciente de su presencia y estar atento a su voz. Cultivar la cercanía con Jesús como el fundamento de toda tu vida.

Seguir a Jesús no es una fórmula de tres pasos, pero sí hay una secuencia. No es un programa sino una progresión.

Veremos esta progresión en el devocional de hoy y en los dos siguientes. Aquí está el resumen: Primero, te acercas y te unes a Jesús; poco a poco empiezas a ser como Él; finalmente, es como si no pudieras evitarlo: empiezas a hacer el tipo de cosas que Él hacía en el mundo.

Vemos esta progresión en las historias de los discípulos originales: Ellos pasaron meses o posiblemente años siguiéndolo por Israel y sentándose a sus pies. Muy lentamente comenzaron a cambiar y, finalmente, los “envió” a predicar (Lucas 9:2).

Tal vez eres nuevo siguiendo a Jesús y estás pensando: ¿Por dónde empiezo? Comienzas aquí, con la meta #1: Estar con Jesus.

Cuando piensas en “cultivar la cercanía con Jesús”, ¿qué te viene a la mente? ¿Estarías dispuesto a detenerte hoy por unos minutos y llevar tu mente y tu corazón de regreso a la presencia de Jesús dentro de ti? ¿Cómo podrías hacerlo de manera práctica?