GuerreroMuestra

En la exitosa película Inception, los personajes principales descubrieron una forma de entrar en otro reino: el reino de los sueños. Mientras que los sueños parecían ser tan vívidos y auténticos como el mundo real donde estaban durmiendo actualmente, el reino de los sueños no era su realidad.

Dado que el sueño parecía ser real para los cinco sentidos, cada personaje tenía que crear un elemento que usarían para hacerles saber si estaban en un sueño o en la realidad. Sin el artículo, la persona en el sueño puede comenzar a creer que el sueño era una realidad, y allí, operando por las leyes de la realidad dentro del reino del sueño.

El objeto del personaje principal era un trompo. Si su trompo seguía girando sin cesar, eso significaba que estaba en un sueño. Si caía, se había despertado. El conocimiento de que estaba en un sueño le permitió tomar más riesgos y vivir de manera diferente porque sabía que en cualquier momento, simplemente podía volver a despertar en la realidad.

¿Es posible que, en este momento, nuestra realidad última no esté sucediendo en el mundo físico como vemos? ¿Podría ser que ahora mismo, hay una batalla librada a nuestro alrededor en los reinos invisibles y esa batalla espiritual tiene efectos físicos en este mundo? Si eso es cierto, entonces la mayoría de nosotros estamos caminando por este mundo sin tener idea de lo que está sucediendo en él. El trompo sigue girando.

El mundo espiritual es real. Las conversaciones, decisiones, batallas y cosas por el estilo que ocurren en el ámbito espiritual impactan unilateralmente lo que ocurre en nuestra vida física. A menos que nos demos cuenta de esa verdad y nos despertemos a la batalla, continuaremos buscando soluciones físicas para resolver los problemas espirituales que se manifiestan en nuestra vida físicas.

Es hora de despertar y entrar en la verdadera pelea.