La salsa: Busca primeroMuestra

Crecimiento espiritual y hambre

Mientras buscamos a Dios primero, anhelamos más de Su presencia. Cuando pensamos en el hambre, es fácil pensar en la comida. La verdad es que todos tenemos deseos y necesidades en esta vida. Sí, tenemos hambre física y emocional, intelectual y espiritual. Mientras Jesús caminó por la tierra, a menudo se describió a sí mismo como el "pan de vida", diciéndole a Su pueblo que "el que a mí viene, nunca pasará hambre, y el que en mí cree, nunca tendrá sed". Jesús satisface todas nuestras necesidades. Como con cualquier relación, nuestra relación con Jesús es una elección, y el deseo de buscar una relación es intencional. Con la ayuda de la oración y del Espíritu Santo, progresamos en nuestra relación con Jesús al encontrar nuestra satisfacción en Él. No nos estancamos en nuestra relación, ya que siempre hay más de Dios por conocer, amar y experimentar. Puede ser tentador, cuando estamos satisfechos con nuestra relación con Jesús, creer la mentira de que no necesitamos más de Su presencia en nuestras vidas. La Biblia dice que cuando buscamos a Dios de todo corazón, lo encontraremos. Así que hoy, le pedimos más a Él y nos mantenemos firmes en la promesa de que Él se encontrará con nosotros en nuestro deseo. Al continuar teniendo más hambre del Señor, construimos nuestra relación con Jesús y buscamos la vida con Él diariamente.

Aplicación/ Reflexión:

• ¿Qué paso puedes dar para aumentar tu hambre espiritual por el Señor?
• ¿Qué te ha enseñado Dios sobre el hambre espiritual?
• ¿Cómo puede ayudar el caminar en una comunidad piadosa a cultivar y hacer crecer tu hambre espiritual?

Oración:

Señor, te necesito. Ayúdame a nunca olvidar que todas mis necesidades son satisfechas solo por Ti. Me arrepiento de los momentos en que busqué la realización fuera de Ti. Ruego que hoy despiertes un nuevo deseo y hambre por Ti, un nuevo hambre por la pureza, el amor, la paciencia, la generosidad y el servicio. Hoy, elegí invertir en esta relación para crecer Contigo y aprender más sobre Tu bondad y fidelidad. Dios, oro para experimentar más de Ti. En el nombre de Jesús, oro, ¡amén!