La búsqueda en sieteMuestra

"El corazón me dice: ¡Busca su rostro! Y yo, Señor, tu rostro busco". Salmos 27:8

Todos sentimos una fuerza, una atracción, un anhelo interior. Esta fuerza viene de lo más profundo de tu ser, de lo más hondo de tu corazón. Existe como una extensión de tu alma. El anhelo del corazón es su manera de pedir algo. En la mayoría de los casos, el corazón está pidiendo ser llenado.

Toda persona nace necesitando amor, y esta suele ser la petición más importante del corazón. Al buscar a Dios primero y al experimentar las cosas de Dios, enseñamos a nuestros corazones a anhelar la llenura que viene de Él. Dios es amor, y por tanto, a medida que nuestro corazón se llena más de Él, recibe amor.

El Salmo 27:8 dice que el corazón pide la búsqueda del rostro de Dios. El corazón sabe que necesita más de Dios. Ya seas consciente o no, tu corazón lo anhelaba. Pidió más de Dios y te llevó a esta misma devoción. Al leer el título de La búsqueda en 7 o te atrajo el nombre o algo desde lo interior de ti te llevó aquí. Sigue ese llamado.

A medida que continúes buscándolo, la llenura de tu corazón se transformará desde dentro. Sanará tu corazón en áreas que quizás nunca supiste que necesitaban sanidad. Creará en ti deseos divinos dentro de ti que nunca creíste posibles. Siéntate y observa a Dios obrar en tu corazón mientras buscas Su rostro.

Hoy, toma un momento para reflexionar sobre lo que te atrajo de este devocional. Piensa en las cosas que pueden haber roto tu corazón. Comprométete con Dios hoy para continuar buscando Su rostro y pídele que llene tu corazón con más de Él y de Su poder sanador.