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Restauración total

Por Robert Morris

¿Alguna vez has perdido algo muy valioso para ti? ¿Algo que, cuando lo perdiste, sentiste que nunca volverías a ser el mismo? Tal vez fue una amistad o una relación. Tal vez perdiste tu matrimonio, o uno de tus hijos tomó el camino equivocado. Tal vez perdiste una gran inversión o incluso tu salud. Tal vez simplemente hayas perdido el rumbo de tu vida. Estos son ejemplos obvios de cosas que suceden en lo natural, pero quiero que pienses en ellos espiritualmente.

Cuando pierdes algo, ¿sabes lo que tienes que hacer? ¡Necesitas encender una lámpara! Uno de los mejores momentos para leer la Palabra de Dios es cuando has perdido algo o alguien importante y valioso para ti. Él te ha dado una lámpara que puede iluminar tu camino si se lo permites. De hecho, Jesús nos cuenta una parábola para probar este punto.

En Lucas 15, Jesús nos habla de tres cosas que se perdieron: una oveja, una moneda y un hijo. La mayoría de nosotros conocemos la historia del hijo perdido (hijo pródigo), pero quiero que nos centremos en la parábola de la moneda perdida. En Lucas 15:8, Jesús dice: "O supongamos que una mujer tiene diez monedas de plata y pierde una. ¿No enciende una lámpara, barre la casa y busca con cuidado hasta encontrarla?" La mujer de la historia encendió una lámpara cuando perdió algo valioso para ella. Jesús nos dice que podemos hacer lo mismo permitiendo que la Palabra de Dios sea una lámpara para nuestros pies.

Conozco a parejas de nuestra iglesia que estuvieron a punto de perder sus matrimonios. Para algunos, parecía que el divorcio era inevitable. En lugar de perder sus matrimonios, comenzaron a enfocarse en la Palabra de Dios y a permitir que fuera una lámpara en sus vidas y familias. Fue entonces cuando algo comenzó a suceder. Dios comenzó a rescatar sus relaciones, a restaurar sus matrimonios y a hacerlos aún más fuertes de lo que eran antes.

No importa lo que hayas perdido, Dios quiere traer restauración a tu vida, tal vez ayudándote a recuperar lo que perdiste o simplemente ayudándote a sanar y seguir adelante. Pero tienes que dar el primer paso y empezar a encender una lámpara cada día para que Él pueda hablarte, sanarte y restaurarte a través de Su Palabra.

Oración

Señor, gracias por darme Tu Palabra. Gracias por recuperar lo que se ha perdido. Por favor permite que la luz brille en las áreas de mi vida que necesitan ser transformadas por Tu Palabra. En el nombre de Jesús, amén.

Versículo para memorizar

Tu palabra es una lámpara a mis pies; es una luz en mi sendero. Salmos 119:105