Jonás - Amar al falto de amorMuestra

Dios es el que da nuevas oportunidades

Lectura: Jonás 3:1-3

DEVOCIONAL: Lamentaciones 3:21-23

“Esto recapacitaré en mi corazón, por lo tanto esperaré. Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad.” – Lamentaciones 3:21-23

Una vez más, Dios le dice a Jonás “Ve a Nínive”. Y esta vez el profeta sabe exactamente qué hacer. No quería cometer el mismo error dos veces, así que, esta vez, se levantó y se fue directamente a Nínive. Si hubiera hecho esto la primera vez, no tendría que haber pasado por todo lo que vivió. 

Pero, siendo honestos, hay lecciones que solo podemos aprender a las malas. ¿Cuántas veces te has golpeado la cabeza contra la misma pared? A veces aprendemos a base de prueba y error. Quizás no sea lo ideal, pero deja una marca indeleble que nos ayuda a crecer y a evitar el mismo error en el futuro. 

La parte buena es que Dios siempre está dispuesto a darnos una segunda, tercera y décima oportunidad. Su amor nunca termina. Sus misericordias nunca terminan porque son nuevas cada mañana. Esto significa que, cada día, tienes una nueva oportunidad de hacer las cosas bien. Sin importar cuánto la hayas liado, la gracia de Dios siempre te dará una segunda oportunidad. 

¿Hay algo en tu vida que necesites cambiar? ¿Algo que sepas que no estás haciendo bien? ¿Estás resistiéndote a obedecer las órdenes de Dios? Aprovecha todas las oportunidades que Él te dé. No malgastes el tiempo haciendo las cosas a tu manera. 

Querido Dios, ayúdame a hacer las cosas bien. Estoy cansada de repetir los mismos errores una y otra vez; cansada de malgastar el tiempo buscando mi comodidad en lugar de Tu voluntad. Gracias por las oportunidades que me das. Déjame apreciar todas y cada una de ellas y no me dejes acostumbrarme a Tu perdón. Amén.