Viaje al pesebreMuestra

La naturaleza sorprendente de Dios

A veces parece que Dios nunca contesta nuestras oraciones. Así es como se sintió el pueblo de Israel mientras esperaba la venida del Mesías. Cuando Jesús vino, Su llegada fue precisamente a tiempo. Pero muchos no reconocieron la provisión final de Dios porque esperaban a un Mesías que los exaltase a ellos y a su nación, en lugar del Señor mismo. 

Cristo vino a ofrecer vida diferente a todo lo que el mundo puede ofrecer. Él podría haber venido armado con el poder infinito del cielo. En cambio, eligió venir con humildad, como un bebé nacido entre los animales. Sin embargo, Su inesperada vida de servicio nos reveló la perfección del amor incondicional de Dios por la humanidad.

Actividad: La próxima vez que salgas a comer, sorprende a tu camarero con una propina más generosa que una propina promedia. Si esa no es una opción, deja una nota personal especialmente alentadora.