El Viaje del Legado Muestra

Disciplina personal.

Cuando era un niño que crecía en Tennessee, me encantaba montar en bicicleta con mis amigos. Por supuesto, mi bicicleta no tenía todas las opciones de lujo que hay hoy. En esa época, tenía una marcha, y tenía un motor: mis dos piernas. Y esas piernas tenían que trabajar bastante duro porque no tenemos muchos caminos llanos en Tennessee. O estás subiendo o estás bajando.

A menudo, mientras montaba, miraba hacia arriba y veía que el camino que tenía delante iba hacia arriba. Y si la colina era realmente empinada, comenzaba a hacer curvas de derecha a izquierda para mantener mi impulso. Peleaba y luchaba por llegar a la cima de la colina. Muchas veces, me dieron ganas de rendirme.

Pero nunca lo hice.

¿Por qué? Porque el viaje cuesta abajo valía la pena cada pizca de energía necesaria para subir.

Ese es tu destino para el Viaje del Legado. Quieres llegar al lugar donde comienzas a ir cuesta abajo. Deseas llegar a ese punto dulce en el que tus inversiones y ahorros generan cada año más de lo que ganas en tu trabajo.

Eso se llama el punto cumbre, y es un gran lugar para estar. Pero no llegas ahí fácilmente. Requiere mucho trabajo duro durante un período largo de tiempo, y requiere mucha disciplina.

Hebreos 12:11 enfatiza que la disciplina rara vez es divertida, pero es increíblemente necesaria. El dolor del momento es muy real, pero los que pagan el precio ganan al final.

El Viaje del Legado realmente no es el camino fácil. Gran parte del viaje es cuesta arriba. Pero cuando llegas a la cima, puedes deslizarte por el otro lado. Además, Dios sonríe porque has sido un siervo fiel. Está disfrutando el viaje contigo.

Y eso es un sentimiento increíble.

Así que sigue pedaleando. Mantente disciplinado y trabaja duro para construir un legado que perdure. Cambiará tu vida y tu futuro.

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