Decide Creer

Hablar de tiempos de angustia no es fácil, solo el que los ha vivido sabe a qué me refiero, es ese profundo dolor en el alma, confusión, pánico, incertidumbre, es sentirte como en medio del océano a punto de ahogarte.

Yo me he sentido así, y te puedo asegurar que lo único que trajo paz a mi alma y me ayudó a reponer la fe y las fuerzas, fue el Espíritu Santo. Se siente como si Papá Dios extendiera su brazo, te agarrara fuerte de la mano y de un jalón te sacara del agua y te dijera:

“El Señor dice: «Rescataré a los que me aman; protegeré a los que confían en mi nombre. Cuando me llamen, yo les responderé; estaré con ellos en medio de las dificultades. Los rescataré y los honraré. Los recompensaré con una larga vida y les daré mi salvación»” (Salmos‬ ‭91‬:‭14‬-‭16‬ ‭NTV‬‬).

Vivir aferrado a los brazos de Papá Dios no te asegura una vida sin tristezas o sin problemas. ¡Pero si te asegura que Él te cuidará, te protegerá, te sostendrá, te dará paz y larga vida! ¡Hoy decide creer, no temas más!