InofendibleMuestra

"EL CRÍTICO QUE HAY EN MÍ"

Uno de los primeros pasos para no ser ofendidos es reconocer que nosotros mismos, tenemos una gran capacidad para ofender a otros. Es un mecanismo de defensa subestimado.

La mayoría de nosotros rara vez criticamos a otros en voz alta, pero en privado, con tan sólo menospreciar el éxito de otros, nos hace sentir mejor con respecto a nuestras propias deficiencias. Es como si las cosas, carreras y relaciones de otra persona, estuvieran en competencia directa con nuestras cosas, carreras y relaciones. Pero mientras veamos a nuestros amigos y sus vidas como una competencia secreta, siempre ofenderemos a otras personas porque nos cuesta mucho alegrarnos por ellos. Es increíble que las personas puedan pasar una hora en redes sociales e internamente criticar lo que todos los demás están publicando. 

Recuerda esto: cosecharás lo que siembras. La vida no se trata de lo que recibes. La vida se trata de lo que das.

Yo decidí, hace mucho tiempo, que quería ser conocida como una animadora para mi familia, amigos, y las personas a quien más amo. La vida de un fan es mucho más agradable que la vida de un detractor. Cuando comencé a celebrar intencionalmente a otras personas, en realidad me encontré con que me ofendìa cada vez menos.

La celebración genuina del éxito de otra persona, desarma la trampa de la comparación.

Entonces, la pregunta que tienes que hacer es: ¿A quién necesitas celebrar?