Todos quieren ganar pero nadie quiere esperarMuestra

Dios sanará tu corazón, mente y cuerpo
A menudo, la temporada de espera de una persona también es la temporada de curación de esa persona. En lugar de concentrarte en recibir una oración contestada durante esta temporada, ¿qué pasaría si te tomaras el tiempo para concentrarte en volver a estar saludable? Sí, eso incluye la salud física, emocional y espiritual.
Mientras esperas en Dios, es muy importante que reconozca las áreas de tu vida en las que necesitas ser sanado. La curación no se limita sólo a la curación física. La curación también puede tener lugar en tu mente. La curación puede tener lugar en tus emociones.
La Palabra de Dios está sirviendo como tu tratamiento. Dios está dispuesto a proporcionarte todo lo que necesitas para ser sanado. Pero no puedes hacer que Dios te sane de la forma en que quieres que te sane. Tienes que permitir que Dios te sane de la manera en que Él quiere sanarte. Debes confiar en Dios y Su proceso. Es posible que la curación no suceda tan rápido como te gustaría, pero debes creer que el proceso de Dios es el mejor para tu vida.
La verdad es que toda herida sometida a Dios sanará. No importa cuánto dolor hayas experimentado en el pasado. Él sanará tu cuerpo, tu corazón y tu mente, y los volverá hermosos a todos de nuevo.
Escritura
Acerca de este Plan

A través de estas lecturas de comprensión diarias, aprended a cómo esperar en el tiempo de Dios en todos los aspectos de la vida, desde la sanación hasta las relaciones. Descubrid cómo aprovechar al máximo la temporada de espera y orad de acuerdo a la voluntad de Dios. Este devocional está basado en "Todos quieren ganar, pero nadie quiere esperar" por Marcus Gill.
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