Los Lenguajes Del Amor Para Matrimonios

El Agotamiendo De Los Pastores Y La Paz De Cristo

“Cuando EL ALMA DESPIERTA”

¡Hola Rival! Un Plan De Juego Bíblico Para Deportistas Cristianos.

Agotamiento Pastoral

Más Que Palabras: Gracia

Un Matrimonio Que Da Fruto

Sin Filtros: Viviendo Como Verdaderos Hijos De Dios

95 Tesis Para La Nueva Generación

De Camino Con Jesús

La Palabra (versión española)

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 <div class="chapter ch23" data-usfm="2SA.23.11+2SA.23.12+2SA.23.13+2SA.23.14+2SA.23.15+2SA.23.16+2SA.23.17+2SA.23.18+2SA.23.19+2SA.23.20+2SA.23.21+2SA.23.22+2SA.23.23+2SA.23.24+2SA.23.25+2SA.23.26+2SA.23.27+2SA.23.28+2SA.23.29+2SA.23.30+2SA.23.31+2SA.23.32+2SA.23.33+2SA.23.34+2SA.23.35+2SA.23.36+2SA.23.37+2SA.23.38+2SA.23.39">
 <div class="p">11El siguiente fue Sam&#225;, hijo de Agu&#233;, el ararita. Los filisteos se hab&#237;an reagrupado en Lej&#237;, donde hab&#237;a un campo sembrado de lentejas, y la gente huy&#243; ante ellos. 12Pero &#233;l se mantuvo firme en medio del campo y derrot&#243; a los filisteos. Tambi&#233;n aquel d&#237;a el Se&#241;or obtuvo una gran victoria.</div><div class="p"> 13En otra ocasi&#243;n, en la &#233;poca de la cosecha, tres de los Treinta bajaron y fueron a la cueva de Adul&#225;n, a ver a David mientras un destacamento filisteo estaba acampado en el valle de Refa&#237;n. 14David se encontraba en el refugio, al tiempo que una patrulla filistea estaba en Bel&#233;n. 15David formul&#243; este deseo:</div><div class="p">&#8212;&#161;Qui&#233;n me diera a beber agua del pozo que hay a las puertas de Bel&#233;n!</div><div class="p"> 16Entonces los tres h&#233;roes irrumpieron en el campamento filisteo, sacaron agua del pozo que hay a las puertas de Bel&#233;n y se la llevaron a David. Pero &#233;l no quiso beberla y la derram&#243; como ofrenda al Se&#241;or, 17diciendo:</div><div class="p">&#8212;&#161;L&#237;breme el Se&#241;or de beberla, pues es como la sangre de los hombres que han ido a buscarla arriesgando sus vidas!</div><div class="p">Y no quiso beberla. Eso es lo que hicieron los tres h&#233;roes.</div><div class="p"> 18Abisay, hermano de Joab e hijo de Seruy&#225;, era el jefe de los Treinta. Atac&#243; con su lanza a trescientos hombres, los mat&#243; y adquiri&#243; fama con los Tres. 19Recibi&#243; mayores honores que los Treinta#23,19: Treinta: Aunque el texto hebreo dice Tres, otros manuscritos y el paralelo de 23,23a justifican la correcci&#243;n. y lleg&#243; a ser su jefe, pero no igual&#243; a los Tres.</div><div class="p"> 20Bena&#237;as, hijo de Joyad&#225;, era un valiente de Cabsel que realiz&#243; numerosas proezas: mat&#243; a los dos hijos de Ariel, de Moab, y en un d&#237;a de nieve baj&#243; a un aljibe a matar a un le&#243;n.#8,18 (ver 2 Re 2,29-34). 21Tambi&#233;n mat&#243; a un egipcio gigantesco que iba armado con una lanza. Bena&#237;as lo atac&#243; con un palo, arrebat&#243; al egipcio la lanza de las manos y lo mat&#243; con su propia lanza. 22Esto fue lo que hizo Bena&#237;as, el hijo de Joyad&#225;, con lo que adquiri&#243; fama entre los Treinta h&#233;roes. 23Pero, aunque recibi&#243; mayores honores que los Treinta, no lleg&#243; a igualar a los Tres. David lo puso al frente de su guardia personal.</div><div class="p"> 24Tambi&#233;n formaban parte de los Treinta: Asael, el hermano de Joab; Eljan&#225;n, hijo de Dod&#243;, de Bel&#233;n; #2,18-23. 25Sam&#225;, el jarodita; Elic&#225;, tambi&#233;n jarodita; 26Jeles, el paltita; Ir&#225;, hijo de Iqu&#233;s, de Tecoa; 27Abiezer, de Anatot; Mebunay, el jusatita; 28Salm&#243;n, el ajojita; Maharay, de Netof&#225;; 29J&#233;leb, hijo de Baan&#225;, tambi&#233;n de Netof&#225;; Itay hijo de Ribay, de Guibe&#225; de Benjam&#237;n; 30Bena&#237;as, de Pirat&#243;n; Iday, de los Arroyos de Ga&#225;s; 31Abialb&#243;n, el arbateo; Azm&#225;vet, de Bajur&#237;n; 32Elyajb&#225;, el saalbonita, y sus hijos, Jas&#233;n y Jonat&#225;n; 33Sam&#225;, el ararita; Ajiab, hijo de Sarar, tambi&#233;n ararita; 34Elif&#233;let, hijo de Ajasbay, de Maac&#225;; Eli&#225;n, hijo de Ajit&#243;fel, el guilonita; 35Jesray, de Carmel; Paaray, el arbita; 36Jigal, hijo de Nat&#225;n, de Sob&#225;; Ben&#237;, el gadita; 37S&#233;lec, el amonita; Najeray, de Beerot, escudero de Joab, el hijo de Seruy&#225;; 38Ir&#225;, el jitrita; Gareb, tambi&#233;n jitrita; 39y Ur&#237;as, el hitita. En total, treinta y siete.#11,3-21.</div>
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 <div class="chapter ch24" data-usfm="2SA.24">
 <div class="label">24</div><div class="s1">El censo de David</div><div class="r">(1 Cr 21)</div><div class="p"> 1El Se&#241;or volvi&#243; a enojarse con Israel e instig&#243; a David para que les causara da&#241;o, dici&#233;ndole:</div><div class="p">&#8212;Haz el censo de Israel y de Jud&#225;.</div><div class="p"> 2El rey orden&#243; a Joab, jefe de su ej&#233;rcito:</div><div class="p">&#8212;Recorre todas las tribus de Israel, desde Dan hasta Berseba y haz el censo de la poblaci&#243;n, para que pueda conocer su n&#250;mero.</div><div class="p"> 3Joab replic&#243; al rey:</div><div class="p">&#8212;Que el Se&#241;or, tu Dios, multiplique por cien la poblaci&#243;n y que el rey, mi se&#241;or, pueda verlo con sus propios ojos. Pero &#191;por qu&#233; quiere el rey hacer tal cosa?</div><div class="p"> 4Sin embargo, la orden del rey prevaleci&#243; sobre el parecer de Joab y el de los jefes del ej&#233;rcito. As&#237; que Joab y los jefes del ej&#233;rcito se retiraron de la presencia del rey para ir a censar a la poblaci&#243;n de Israel. 5Cruzaron el Jord&#225;n y se detuvieron en Aroer, al sur de la ciudad que est&#225; situada junto al torrente de Gad, en direcci&#243;n a Jazer. 6Llegaron a Galaad y al pa&#237;s de Jods&#237;; luego llegaron a Dan y de all&#237; giraron hacia Sid&#243;n. 7Despu&#233;s llegaron a la fortaleza de Tiro y a todas las poblaciones de los jeveos y los cananeos. Finalmente se dirigieron al sur de Jud&#225;, llegando hasta Berseba. 8As&#237; recorrieron todo el pa&#237;s y, al cabo de nueve meses y veinte d&#237;as, regresaron a Jerusal&#233;n. 9Joab entreg&#243; al rey las cifras del censo de la poblaci&#243;n: en Israel hab&#237;a ochocientos mil guerreros, diestros con la espada; y en Jud&#225;, quinientos mil.</div><div class="p"> 10Despu&#233;s de haber hecho el censo de la poblaci&#243;n, a David le remordi&#243; la conciencia y dijo al Se&#241;or:</div><div class="p">&#8212;He cometido un grave delito haciendo esto. Ahora, Se&#241;or, perdona la culpa de tu siervo, pues he sido muy insensato.</div><div class="p"> 11A la ma&#241;ana siguiente, cuando David se levant&#243;, el Se&#241;or dirigi&#243; al profeta Gad, vidente de David, este mensaje: #1 Sm 22,5.</div><div class="p"> 12&#8212;Ve a decir a David: &#171;Esto dice el Se&#241;or: Te propongo tres castigos; elige uno de ellos y yo lo llevar&#233; a cabo&#187;.</div><div class="p"> 13Gad fue a ver a David y le dijo:</div><div class="p">&#8212;&#191;Qu&#233; prefieres: siete a&#241;os de hambre en tu territorio, tres meses de huida perseguido por tu adversario, o tres d&#237;as de peste en tu territorio? Pi&#233;nsatelo y decide qu&#233; debo responder a quien me ha enviado.</div><div class="p"> 14David respondi&#243; a Gad:</div><div class="p">&#8212;Me pones en un gran aprieto. Pero es preferible caer en manos de Dios, por su gran compasi&#243;n, a caer en manos humanas.</div><div class="p"> 15El Se&#241;or envi&#243; la peste sobre Israel, desde aquella ma&#241;ana hasta el plazo fijado, y desde Dan hasta Berseba murieron setenta mil personas del pueblo. 16Cuando el &#225;ngel extend&#237;a su mano para castigar a Jerusal&#233;n, el Se&#241;or se arrepinti&#243; del castigo y dijo al &#225;ngel que aniquilaba a la poblaci&#243;n:</div><div class="p">&#8212;&#161;Basta ya! &#161;Retira tu mano!</div><div class="p">El &#225;ngel del Se&#241;or estaba junto a la era de Araun&#225;, el jebuseo.#ver Ex 12,23. 17Cuando David vio al &#225;ngel exterminando a la poblaci&#243;n, dijo al Se&#241;or:</div><div class="p">&#8212;&#161;Soy yo el que he pecado, yo soy el culpable! &#191;Qu&#233; ha hecho este reba&#241;o? &#161;Descarga tu mano contra m&#237; y contra mi familia!</div><div class="p"> 18Aquel mismo d&#237;a Gad se present&#243; a decir a David:</div><div class="p">&#8212;Sube a construir un altar al Se&#241;or en la era de Araun&#225;, el jebuseo.</div><div class="p"> 19David fue a hacer lo que le hab&#237;a dicho Gad por orden del Se&#241;or. 20Araun&#225; se asom&#243; y, cuando vio que el rey y sus servidores se dirig&#237;an hacia &#233;l, sali&#243; e hizo una reverencia al rey con su rostro hacia el suelo. 21Luego Araun&#225; pregunt&#243;:</div><div class="p">&#8212;&#191;A qu&#233; se debe la visita de mi se&#241;or, el rey, a su servidor?</div><div class="p">David le respondi&#243;:</div><div class="p">&#8212;Vengo a comprarte la era para construirle un altar al Se&#241;or, a ver si se aleja del pueblo esta plaga.</div><div class="p"> 22Araun&#225; le dijo:</div><div class="p">&#8212;Que mi se&#241;or el rey tome y ofrezca lo que le parezca mejor. Ah&#237; est&#225;n los bueyes para el holocausto y las trillas y los yugos para el fuego.#1 Re 19,21. 23Todo esto, majestad, se lo entrega Araun&#225; al rey.</div><div class="p">Y a&#241;adi&#243;:</div><div class="p">&#8212;&#161;Que el Se&#241;or, tu Dios, te bendiga!</div><div class="p"> 24Pero el rey respondi&#243; a Araun&#225;:</div><div class="p">&#8212;No. Quiero compr&#225;rtela a su precio. No quiero ofrecer al Se&#241;or sacrificios de balde.</div><div class="p">Y David compr&#243; la era y los bueyes por cincuenta siclos de plata. 25Luego David construy&#243; all&#237; un altar al Se&#241;or y ofreci&#243; holocaustos y sacrificios de comuni&#243;n. Entonces el Se&#241;or se compadeci&#243; del pa&#237;s y la plaga se alej&#243; de Israel.</div>
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2 SamuelMuestra

Escritura

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