🌤 Deja que el Cielo inunde tu mente

Ayer hablábamos de la renovación de nuestro entendimiento, y de cómo esta juega un papel clave en nuestra propia transformación.

La Biblia dice en el libro de Proverbios en referencia a la persona que es avara, que, "cual es su pensamiento en su corazón, tal es él" (Proverbios 23:5)

Nuestra forma de pensar determina nuestras acciones. El avaro piensa que no se puede fiar de nadie, que todo el mundo quiere aprovecharse de él, y que su seguridad viene de tener más dinero. Y es esa forma de pensar la que le lleva a ser desconfiado, ruin y falso: ¡es la que le lleva a ser avaro!

Sin embargo, si el avaro se diese cuenta de su error y dejase que su mente fuese renovada, sería transformado: ya no pensaría como un avaro, por lo que dejaría de comportarse como uno. ¡Tan simple como eso! Su vida sería transformada al cambiar su forma de pensar.

Es por eso que Dios nos llama en Su Palabra a renovar nuestros pensamientos.

Es muy interesante las palabras que se emplean en el versículo de Romanos 12:2, cuando hace referencia a la "renovación de vuestro entendimiento...":

• Renovar, según el diccionario, es volver algo a su estado original, hacerlo nuevo otra vez.
• El entendimiento es todo lo que tiene que ver con nuestra forma de entender la realidad, con la mente.

Sí, Dios quiere que tu mente sea renovada, para que empieces a pensar y a ver las cosas como Él las ve. ¡Eso cambiará todo en tu vida!

Pero al igual que antes, esa renovación depende de nosotros. Tenemos que ser nosotros los que demos los pasos necesarios para renovar nuestra mente.

Aquí tienes algunos consejos prácticos para renovar tu mente:

• Pídele a Dios que renueve tu mente, y búscale de lo más profundo de tu corazón
• Estudia la Biblia cada día, buscando escuchar Su voz
• Sé humilde para examinarlo todo, y retener lo bueno
• No tengas miedo de que Dios te muestre nuevas cosas, aunque estas desafíen quizá tu manera de pensar. ¡Dios quiere revelarte cosas nuevas!

Todo esto te ayudará a renovar tu mente, para que puedas ser libre de todas las mentiras del enemigo, y que empieces a llenarte de los pensamientos de Dios.

Querido/a amigo/a, cuando el Cielo inunda tu forma de pensar, ¡la transformación es inevitable!

¡Eres un Milagro!

Christian Misch