Falsa Identidad: Conoce Tu Verdadera IdentidadMuestra

¿Qué es identidad impuesta?

Pasamos muchos años descubriendo quiénes somos. Nos miramos al espejo, una y otra vez, queriendo sentir la satisfacción, qué, lo que vemos es lo mismo que sentimos. En ocasiones decimos“me veo, pero… siento que no soy yo”. ¿Te ha pasado que tu cabello, tu cuerpo y hasta tu forma de vestir no definen lo que sientes? ¿Te has sentido como si estuvieras actuando y no viviendo tu propia vida? ¿Te sientes perdida?

Imagina una delicada flor que crece naturalmente, con belleza única. Todo apunta a que tendrá un crecimiento óptimo revelando su belleza. Un día la cortan y la colocan en un pequeño tiesto que aparenta ser bonito, pero a su vez, incómodo. Siendo, este bello tiesto, uno que no se amolda a ella. Limitando cada vez más su crecimiento. La flor deja de ser una que agrada con su rico aroma para ser una flor de opaco color y hojas caídas. Pudiéramos pensar“es mejor que se vea linda a que se sienta bien”, “recuerda la apariencia es muy importante”. Y sin duda, esto es muy parecido a lo que nos dice la sociedad.

La realidad es que sentirnos cómodas amando cada área de nuestra vida nos dará identidad. Si alguna vez te has sentido como esta flor, en un pequeño tiesto, es probable que tengas una identidad impuesta.

Identidad que alguien eligió por ti. Identidad donde pesa más tu apariencia que tu esencia. Identidad que no pudiste descubrir y mucho menos desarrollar porque otros determinaron cómo debías ser. Identidad impuesta que te dice lo que para otros es agradable, aunque anule y arrase con lo está en tu corazón. Identidad que te paraliza, que te detiene, que te encarcela y falsamente te hace creer que no podrás escapar de ella.

La pregunta es, ¿hasta cuándo permitirás que esta identidad te defina? No sigas viviendo con la carga de ser lo que otros esperan y mucho menos con una identidad aplastante de alguien quien no eres. Atrévete a ser libre encontrando tu verdadera identidad.

Amiga, quiero invitarte a que tengas valentía, seas fuerte y determinada. Suelta esta identidad que no te define. Busca en Jesús los sueños y planes que tiene guardados para ti. La identidad impuesta no debe seguir atando tu corazón. Detente, mírate al espejo, descúbrete, hazte preguntas y permítete ser esa hermosa flor que Dios sueña que seas. Eres hija amada y Dios quiere tener complacencia en tu corazón.

Oramos juntas: Dios, por mucho tiempo he sentido una gran carga porque otros me han impuesto cómo ser, qué pensar y hasta cómo actuar. En lo profundo de mi corazón sé que no soy así. Ayúdame a ser libre de esta identidad impuesta. Y sin temor conocer, junto a Ti, mi verdadera identidad. En Tu nombre Jesús, amén.