Encontrando propósito

Ahora que hemos establecido las cosas que no nos satisfacen, y Aquel que lo hace, veamos las formas únicas e individuales en las que eso se manifiesta en nuestra vida personal.

Proverbios 29:18 dice esto:

'Donde no hay visión, el pueblo se extravía;

¡dichosos los que son obedientes a la ley!'.

El segundo paso para encontrar y vivir con un propósito es consultar a Aquel que nos da el propósito.

Jeremías 29:11-13 dice:

'Porque yo conozco los planes que tengo para ustedes;" afirma el Señor, “planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza. Entonces ustedes me invocarán, vendrán a suplicarme y yo los escucharé. Me buscarán y me encontrarán cuando me busquen de todo corazón’.

Dios nos predestinó antes de que naciéramos para hacer cosas buenas sobre la tierra (lee Efesios 2:10). Él esculpió y creó una vida para nosotros que pudiera ser plena, enriquecedora, ¡e incluso desafiante, a veces! Fuimos diseñados para vivir dentro de los límites del amor de Dios; ahí es donde florecemos más.

¡La mejor forma de descubrir el plan de Dios para nuestra vida es preguntárselo!

Pasa un tiempo en oración concentrada, tal vez incluso un período prolongado, y busca el corazón de Dios para tu vida. Dios nos promete que cuando oremos, Él nos escuchará. Él nos promete en las Escrituras que cuando lo busquemos de todo corazón, lo encontraremos.

Si estás luchando para discernir lo que Dios está diciendo, también puedes consultar a un líder o mentor de tu iglesia para que te ayude a descubrir lo que Dios quiere hacer en tu vida. Muchas personas en el cuerpo de Cristo tienen el don de profecía y de dar palabras de conocimiento y de ánimo. No sientas vergüenza en buscar a esas personas y pedirles su guía.

¡Diviértete! Disfruta buscar a Dios para obtener dirección y propósito. Él ama dar buenos regalos a sus hijos, y el regalo de una vida guiada por propósito es uno de ellos.