Ser intencional en tu matrimonioMuestra

Conectarse diariamente

Conectarnos verdaderamente con nuestros cónyuges, cada día, es esencial para nuestro matrimonio. Sin eso, veremos que nuestra relación se empieza a estancar. Cuando no somos intencionales y no invertimos en nuestro cónyuge, eventualmente esto nos hará crecer separados y volvernos en nada más que compañeros de cuarto y co-padres. La conexión diaria con nuestro cónyuge requiere proactividad. Aquí hay algunas prácticas fundamentales que debemos incorporar cada día. 

Ora 
Orar por las personas no es tan difícil para los seguidores de Jesús. Pero comprometerse para orar con alguien más, especialmente con nuestro cónyuge, parece ser algo que muchas parejas rechazan. Es fácil decir una oración ocasional a Dios para nuestro cónyuge cuando necesita conseguir un trabajo o recomponerse de una enfermedad, pero ¿orar en voz alta con él? Esto puede ser vergonzante y temeroso porque las personas piensan que no lo están haciendo bien. La meta de orar juntos no es para sonar espiritual, sino para conectarte en lo más profundo con nuestro Creador. Si orar no es algo que haces consistentemente con tu cónyuge, toma la decisión de empezar hoy mismo. Comienza poco a poco, pidiéndole que te de fuerzas para afrontar el día y alterna cada día quien lidera la oración. Al convertir esto en una práctica espiritual diaria, no sólo se fortalecerá tu conexión con Dios y con tu cónyuge, sino que tus oraciones serán más profundas y de temas más amplios. 

Comunícate 
La comunicación en un matrimonio es increíblemente vital. Nos previene de naufragar de nuestro cónyuge. Cuando hablamos de nuestro día, compartimos nuestras experiencias y le contamos a nuestro cónyuge las cosas que nos preocupan, eso nos conecta el uno con el otro y fortalece nuestro matrimonio. Cuando vamos un paso más adelante y compartimos nuestra relación y qué estamos aprendiendo con Dios, la conexión se vuelve un poco más íntima. Haz tiempo para comunicarte más con tu cónyuge cada día, no sólo compartiendo tu corazón, sino siendo un buen oído también. Discute el estado de tu comunicación y trata de mejorarla si es necesario. 

Sé considerado
Cuando recién comenzamos una relación amorosa, no se nos dificulta pensar en esa persona. Pero, mientras el tiempo pasa, especialmente dentro del matrimonio, eso no nos sale tan fácil. Eso quiere decir que tenemos que esforzarnos en ser considerados. Tal vez, podemos ponernos recordatorios para llamarnos o mensajearnos cada día. Podemos dejar notas para que las encuentre. O podemos llamar o mandar un mensaje cuando veamos algo que nos recuerde a ellos y nos haga estar agradecidos. Puede que no sea muy romántico tener que programar un recordatorio, pero la alternativa es desatender por completo a nuestro cónyuge. Pregúntale a tu cónyuge que necesita que hagas y luego haz el esfuerzo para lograrlo.

Reflexiona
¿En qué área necesitas mejorar tu matrimonio? ¿Oración, comunicación o ser más considerado?