Miedo y AnsiedadMuestra

Jueves – Temor a la Soledad

Lectura: Salmos 68:5; Isaías 41:10 

DEVOCIONAL: Isaías 41:10

En el Texto

Hay una razón por la que el confinamiento solitario es uno de los castigos más graves dentro del sistema penal. La mayoría de las personas no quieren estar solas por un período prolongado. La soledad puede afectarnos profundamente, causando tristeza, dolor y depresión.

Este miedo a la soledad puede llevarnos a gravitar hacia caminos que nos causan más daño que bien en esos estados de fragilidad. Sin importar dónde solemos recurrir, nada va a satisfacer nuestras necesidades o nuestra alma como nuestro Padre Celestial. Debemos darnos cuenta de que, como creyentes, no tenemos motivos para experimentar la soledad porque siempre tenemos acceso a Dios. Nunca debemos temer la deserción o el abandono. Dios está aquí para sanar a los corazones solitarios y quebrantados, sin importar la situación.

¿Hay un vacío de soledad que has intentado llenar en tu vida? Dios quiere encontrarte en tu soledad. Podemos acudir a Él con nuestros sentimientos, preocupaciones y cargas. ¿Qué has usado para satisfacer un anhelo que solo Dios puede llenar? Intenta entregarle esta área a Él. Observa con atención lo que Él hará en tus circunstancias y en tu corazón mientras satisface tus necesidades.

Oración

Amado Dios, gracias por amarme en los tiempos buenos y en los difíciles. Te alabo Señor por Tu presencia en mi vida. Dame fe para confiar en que estás conmigo, en especial en esos momentos en los que no puedo sentir Tu presencia. Perdóname por esas veces en las que he buscado consuelo en otras cosas que no me llenan como tú lo haces. Gracias por Tu perdón. Amén.