Esperanza para la madre en el pospartoMuestra

No pases por esto sola

En el día 2 hablamos un poco sobre cómo el aislarte no es bueno y que el compañerismo con otras personas es una línea de vida. Hoy ampliaremos este tema.

La depresión postparto frecuentemente crea sentimientos de culpa, vergüenza y falta de valía, que solo aumentan la tendencia a aislarse, tanto física como emocionalmente. Una habitación oscura no es tu respuesta, así que permite que la luz de Dios brille en todos los rincones oscuros. “La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella.” -Juan 1:5. Permitir que Su presencia ilumine tus momentos oscuros requiere de transparencia y autenticidad. Permitir a otros que entren en tu mundo oscuro de las dificultades del postparto puede ser difícil, pero es un paso importante en tu proceso de sanidad. 

Uno de mis pasajes favoritos de la Bibla es Éxodo 17:10-13. Los israelitas y los amalecitas estaban en plena batalla. Moisés estaba tras bambalinas orando sobre la batalla. Sostenía su vara en alto con su mano y oraba por la victoria. Mientras sus manos estuvieran en alto, los israelitas ganaban. Cuando bajaba sus manos, los israelitas comenzaban a perder. Sus brazos se cansaron por estar levantados todo el día, así que sus amigos Aarón y Hur vinieron a ayudarlo y sostuvieron sus manos. Sus manos se mantuvieron levantadas hasta el atardecer y los israelitas ganaron la batalla. 

Esta es una hermaos imagen de amistad y comunidad. Moisés no podía solo. Él habría bajado sus manos; los israelitas habrían perdido la batalla y los versículos siguientes habrían contado una historia muy distinta. Pero Aarón y Hur vieron que necesitaba ayuda e intervinieron. Aarón sostuvo un brazo. Hur sostuvo el otro brazo. Y entre los tres vieron cómo obtenían la victoria. 

Creo que es muy común que muchos de nosotros actuemos como si todo esta bien. Cuando estamos bien, no vemos que muchos se acerquen a ayudarnos porque piensan que no necesitamos ayuda. Es muy importante (y humillante) pedir ayuda. Está bien no estar bien. Y hay personas en tu vida a quienes les encantaría venir en tu ayuda. El primer paso es decir que necesitas ayuda. ¿Quiénes son tus amigos como Aarón y Hur que podrían venir a sostener tus brazos? ¿O llevarte una comida preparada para que no tengas que cocinar? ¿O comprar víveres por ti porque te estás ahogando en casa? ¿Quén puede venir a cuidar a tu bebé para que tú pueda tomar una siesta? 

La comunidad es crucial. Si no hay nadie en tu vida que pueda ayudarte en esta época, ora para que Dios te dé una amiga. O varios amigos para ti y tu esposo. La vida está diseñada para vivirla en comunidad. No estamos hechos para vivir solos en una isla. 

Encuentra amigos que te animen con palabras buenas y útiles como dice en Efesios 4:29. 1 Pedro 4:9 dice “hospedaos los unos a los otros sin murmuraciones.” Es importante detenernos aquí y notar que es primordial recordar estos versículos y verdades cuando vemos a otros pasar por un mal momento. Si es época posparto o algo distinto, seamos como Aarón y Hur. Levantemos sus brazos. Animémoslos. Hagámos algo por ellos. 

No vivas sola tu época postparto. No finjas estar bien. No actúes como si todo está perfecto. Genuinamente le importas a las personas y desean lo mejor para ti. Quieren ayudarte. Humildemente pide ayuda. Permanece en comunidad. Eso hace que la época sea un poco más fácil. 

Paso de acción de hoy:

Cada día, queremos animarte no sólo con la verdad, sino también con un paso de acción. El paso de acción de hoy es que seas intencional en cuanto a la comunidad. Ponte en contacto con personas hoy, déjales saber sobre alguna necesidad que tienes. Si no tienes una comunidad en tu vida, piensa en maneras para pertenecer a una. Conéctate en una iglesia. Envía un texto a una amiga nueva para tomar un café. La comunidad es importante en cada etapa de nuestras vidas, incluyendo la época postparto. Busca personas seguras para compratir con ellas, permitiéndoles que te hablen vida. Usa los recursos formales también como la organización Apoyo Internacional Postparto, que ofrece educación, recursos y grupos de apoo para madres postparto. 

Oración para la madre postparto

Señor, oro para que me dés la audacia de pedir ayuda. Te pido humildad para no fingir estar "bien". Oro que Tú me proveas a través de mis amigos y comunidad. Agradezco el ánimo y esperanza que Tú me das. Gracias por mi dulce bebé. Gracias por lo bueno, lo malo, lo fácil y lo difícil. Eres fiel en todo momento. Estoy agradecida por Ti y por Tu Palabra que proporciona verdad y esperanza a mi alma cansada. Amén.