7 Días En Busca De Dios.

Lidera con el Corazón de Dios

Madre, Tu Amor Refleja a Dios

Actitudes de un Matrimonio Indivisible

Perseverar: Hechos 2

El Pentecostés Lo Cambió Todo

7 Días Para Restaurar Tu Salud Emocional.

No Te Pierdas En Tus Emociones- La Metáfora Del Bosque

Tormenta en La Travesía

Mujer Sellada - Parte 1

La Palabra (versión española)

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 <div class="chapter ch7" data-usfm="JHN.7.1+JHN.7.2+JHN.7.3+JHN.7.4+JHN.7.5+JHN.7.6+JHN.7.7+JHN.7.8+JHN.7.9">
 <div class="p">1Pas&#243; alg&#250;n tiempo, y Jes&#250;s segu&#237;a recorriendo Galilea. Evitaba andar por Judea, porque los jud&#237;os buscaban una ocasi&#243;n para matarlo.#5,18; 7,19.25. 2Cuando ya estaba cerca la fiesta jud&#237;a de las Caba&#241;as,#Lv 23,34; Nm 29,12-39; Dt 16,13-16. 3sus hermanos le dijeron:</div><div class="p">&#8212;Deber&#237;as salir de aqu&#237; e ir a Judea, para que tus seguidores puedan ver tambi&#233;n all&#237; las obras que haces.#Mt 13,55; Mc 3,31. 4Nadie que pretenda darse a conocer act&#250;a secretamente. Si en realidad haces cosas tan extraordinarias, date a conocer al mundo.</div><div class="p"> 5Y es que ni siquiera sus hermanos cre&#237;an en &#233;l. 6Jes&#250;s les dijo:</div><div class="p">&#8212;Todav&#237;a no ha llegado mi hora; para vosotros, en cambio, cualquier tiempo es apropiado. 7El mundo no tiene motivos para odiaros; a m&#237;, en cambio, me odia porque pongo de manifiesto la malicia de sus obras.#3,19-21; 15,18. 8Subid vosotros a la fiesta. Yo no voy a esta fiesta pues a&#250;n no ha llegado mi hora.</div><div class="p"> 9Dicho esto, se qued&#243; en Galilea.</div><div class="p"> </div>
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 <div class="book bkLUK">
 <div class="chapter ch9" data-usfm="LUK.9.51+LUK.9.52+LUK.9.53+LUK.9.54+LUK.9.55+LUK.9.56+LUK.9.57+LUK.9.58+LUK.9.59+LUK.9.60+LUK.9.61+LUK.9.62">
 <div class="p">51Cuando ya iba acerc&#225;ndose el tiempo de su Pascua, Jes&#250;s tom&#243; la firme decisi&#243;n de dirigirse a Jerusal&#233;n. 52Envi&#243; por delante mensajeros que entraron en una aldea de Samar&#237;a para prepararle alojamiento.#2 Re 17,24-41; Jn 4,9 (ver 10,33; 17,16). 53Pero como Jes&#250;s se dirig&#237;a a Jerusal&#233;n, los samaritanos se negaron a recibirlo. 54Al ver esto, los disc&#237;pulos Santiago y Juan dijeron:</div><div class="p">&#8212;Se&#241;or, &#191;ordenamos que descienda fuego del cielo y los destruya?#2 Re 1,10-12.</div><div class="p"> 55Pero Jes&#250;s, encar&#225;ndose con ellos, los reprendi&#243; con severidad.</div><div class="p"> 56Y se fueron a otra aldea.</div><div class="s1">Condiciones del discipulado</div><div class="r">(Mt 8,19-22)</div><div class="p"> 57Mientras iban de camino, dijo uno a Jes&#250;s:</div><div class="p">&#8212;Estoy dispuesto a seguirte adondequiera que vayas.</div><div class="p"> 58Jes&#250;s le contest&#243;:</div><div class="p">&#8212;Las zorras tienen guaridas y los p&#225;jaros nidos, pero el Hijo del hombre ni siquiera tiene donde recostar la cabeza.</div><div class="p"> 59A otro le dijo:</div><div class="p">&#8212;S&#237;gueme.</div><div class="p">A lo que respondi&#243; el interpelado:</div><div class="p">&#8212;Se&#241;or, perm&#237;teme que vaya primero a enterrar a mi padre.#Mt 4,19; 9,9 y par.; Jn 21,22.</div><div class="p"> 60Jes&#250;s le contest&#243;:</div><div class="p">&#8212;Deja que los muertos entierren a sus muertos. T&#250; ded&#237;cate a anunciar el reino de Dios.</div><div class="p"> 61Otro le dijo tambi&#233;n:</div><div class="p">&#8212;Estoy dispuesto a seguirte, Se&#241;or, pero perm&#237;teme que primero me despida de los m&#237;os.</div><div class="p"> 62Jes&#250;s le contest&#243;:</div><div class="p">&#8212;Nadie que ponga su mano en el arado y mire atr&#225;s es apto para el reino de Dios.</div>
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 <div class="book bkLUK">
 <div class="chapter ch10" data-usfm="LUK.10">
 <div class="label">10</div><div class="s1">Los setenta y dos enviados</div><div class="r">(Mt 9,37)</div><div class="p"> 1Despu&#233;s de esto, el Se&#241;or escogi&#243; tambi&#233;n a otros setenta y dos,#10,1: setenta y dos: Numerosos mss., entre ellos varios de reconocido valor, dicen setenta. y los envi&#243; de dos en dos delante de &#233;l a todos los pueblos y lugares adonde &#233;l pensaba ir.#9,1 y par.; Jn 4,35. 2Les dijo:</div><div class="p">&#8212;La mies es mucha, pero son pocos los obreros. Por eso, pedidle al due&#241;o de la mies que mande obreros a su mies. 3&#161;Poneos en marcha! Yo os env&#237;o como corderos en medio de lobos. 4No llev&#233;is monedero, zurr&#243;n, ni calzado; y no os deteng&#225;is tampoco a saludar a nadie en el camino. 5Cuando entr&#233;is en alguna casa, decid primero: &#171;Paz a esta casa&#187;. 6Si los que viven all&#237; son gente de paz, la paz de vuestro saludo quedar&#225; con ellos; si no lo son, la paz se volver&#225; a vosotros. 7Quedaos en la misma casa, comiendo y bebiendo de lo que tengan, porque el que trabaja tiene derecho a su salario. No vay&#225;is de casa en casa.#Mt 10,10; 1 Co 9,6-18; 2 Co 11,7-11; 1 Tm 5,18. 8Cuando llegu&#233;is a un pueblo donde se os reciba con agrado, comed lo que os ofrezcan.#1 Co 10,27. 9Curad a los enfermos que haya en &#233;l y anunciad: &#171;El reino de Dios est&#225; cerca de vosotros&#187;.#10,11; 11,20; 17,21; 19,11; 21,31; Mt 3,2; 4,17; 12,28; Mc 1,15. 10Pero si entr&#225;is en un pueblo donde se nieguen a recibiros, recorred sus calles diciendo: 11&#171;&#161;Hasta el polvo de vuestro pueblo, que se nos ha pegado a los pies, nos lo sacudimos contra vosotros! Sin embargo, sabed que el reino de Dios ya est&#225; cerca&#187;.#9,5. 12Os digo que, en el d&#237;a del juicio, los habitantes de Sodoma ser&#225;n tratados con m&#225;s clemencia que los de ese pueblo.</div><div class="s1">Lamento por las ciudades rebeldes</div><div class="r">(Mt 10,40; 11,20-24)</div><div class="p"> 13&#161;Ay de ti, Coraz&#237;n! &#161;Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sid&#243;n se hubieran realizado los milagros que se han realizado en medio de vosotras, ya hace mucho tiempo que sus habitantes se habr&#237;an convertido y lo habr&#237;an demostrado llevando luto y ceniza. 14Por eso, Tiro y Sid&#243;n ser&#225;n tratadas en el juicio con m&#225;s clemencia que vosotras.</div><div class="p"> 15Y t&#250;, Cafarna&#250;n, &#191;crees que vas a ser encumbrada hasta el cielo? &#161;Hasta el abismo, ser&#225;s precipitada!#Is 14,13-15.</div><div class="p"> 16El que os escuche a vosotros, es como si me escuchara a m&#237;; el que os rechace a vosotros, es como si me rechazara a m&#237;; y el que me rechace a m&#237;, es como si rechazara al que me envi&#243;.#Mt 18,5 y par.; Jn 5,23; 12,44; 13,20; 15,23.</div><div class="s1">Regreso de los setenta y dos enviados</div><div class="p"> 17Los setenta y dos volvieron llenos de alegr&#237;a, diciendo:</div><div class="p">&#8212;&#161;Se&#241;or, hasta los demonios nos obedecen en tu nombre!</div><div class="p"> 18Jes&#250;s les contest&#243;:</div><div class="p">&#8212;He visto a Satan&#225;s que ca&#237;a del cielo como un rayo.#Jn 12,31; Ap 12,8-9 (ver Is 14,12). 19Os he dado autoridad para que pisote&#233;is las serpientes, los escorpiones y todo el poder del enemigo, sin que nada ni nadie pueda da&#241;aros.#Gn 3,15; Sal 91,13; Mc 16,18. 20Pero aun as&#237;, no os alegr&#233;is tanto de que los esp&#237;ritus malignos os obedezcan como de que vuestros nombres est&#233;n escritos en el cielo.</div><div class="s1">Alegr&#237;a de Jes&#250;s</div><div class="r">(Mt 11,25-27; 13,16-17)</div><div class="p"> 21En aquel mismo momento, el Esp&#237;ritu Santo llen&#243; de alegr&#237;a a Jes&#250;s, que dijo:</div><div class="p">&#8212;Padre, Se&#241;or del cielo y de la tierra, te alabo porque has ocultado todo esto a los sabios y entendidos y se lo has revelado a los sencillos. S&#237;, Padre, as&#237; lo has querido t&#250;.#1 Co 1,26-28. 22Mi Padre lo ha puesto todo en mis manos y nadie sabe qui&#233;n es el Hijo, sino el Padre; y nadie sabe qui&#233;n es el Padre, sino el Hijo y aquellos a quienes el Hijo quiera revel&#225;rselo.#Jn 10,15.</div><div class="p"> 23Luego se volvi&#243; hacia sus disc&#237;pulos y les dijo aparte:</div><div class="p">&#8212;&#161;Felices los que puedan ver todo lo que vosotros est&#225;is viendo! 24Os digo que muchos profetas y reyes quisieron ver lo que vosotros est&#225;is viendo, y no lo vieron; y o&#237;r lo que vosotros est&#225;is oyendo, y no lo oyeron.</div><div class="s1">El mandamiento m&#225;s importante</div><div class="r">(Mt 22,35-39; Mc 12,28-31)</div><div class="p"> 25Por entonces, un doctor de la ley, queriendo poner a prueba a Jes&#250;s, le hizo esta pregunta:</div><div class="p">&#8212;Maestro, &#191;qu&#233; he de hacer para alcanzar la vida eterna?#3,10; 11,16; 18,18; Mt 16,1; 19,3; 22,35; Mc 10,2; Hch 2,27; 16,30; 22,10.</div><div class="p"> 26Jes&#250;s le contest&#243;:</div><div class="p">&#8212;&#191;Qu&#233; est&#225; escrito en la ley de Mois&#233;s? &#191;Qu&#233; lees all&#237;?</div><div class="p"> 27&#201;l respondi&#243;:</div><div class="p">&#8212;Amar&#225;s al Se&#241;or tu Dios con todo tu coraz&#243;n, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con toda tu inteligencia; y a tu pr&#243;jimo como a ti mismo.#Dt 6,5; 10,12; Lv 19,18; Jos 22,5 (ver Mt 5,43; 19,19 y par.; Rm 13,9; Ga 5,14; Stg 2,8).</div><div class="p"> 28Jes&#250;s le dijo:</div><div class="p">&#8212;Has respondido correctamente. Haz eso y vivir&#225;s.#Lv 16,5; Rm 10,5; Ga 3,12.</div><div class="s1">Par&#225;bola del buen samaritano</div><div class="p"> 29Pero el maestro de la ley, para justificar su pregunta, insisti&#243;:</div><div class="p">&#8212;&#191;Y qui&#233;n es mi pr&#243;jimo?</div><div class="p"> 30Jes&#250;s le dijo:</div><div class="p">&#8212;Un hombre que bajaba de Jerusal&#233;n a Jeric&#243; fue asaltado por unos ladrones, que le robaron cuanto llevaba, lo hirieron gravemente y se fueron, dej&#225;ndolo medio muerto. 31Casualmente bajaba por aquel mismo camino un sacerdote que vio al herido, pero pas&#243; de largo. 32Y del mismo modo, un levita, al llegar a aquel lugar, vio al herido, pero tambi&#233;n pas&#243; de largo. 33Finalmente, un samaritano que iba de camino lleg&#243; junto al herido y, al verlo, se sinti&#243; conmovido.#9,52-53. 34Se acerc&#243; a &#233;l, le vend&#243; las heridas poniendo aceite y vino sobre ellas, lo mont&#243; en su propia cabalgadura, lo condujo a una posada pr&#243;xima y cuid&#243; de &#233;l. 35Al d&#237;a siguiente, antes de reanudar el viaje, el samaritano dio dos denarios al posadero y le dijo: &#171;Cuida bien a este hombre. Si gastas m&#225;s, te lo pagar&#233; a mi vuelta&#187;. 36Pues bien, &#191;cu&#225;l de estos tres hombres te parece que fue el pr&#243;jimo del que cay&#243; en manos de ladrones?</div><div class="p"> 37El maestro de la ley contest&#243;:</div><div class="p">&#8212;El que tuvo compasi&#243;n de &#233;l.</div><div class="p">Y Jes&#250;s le replic&#243;:</div><div class="p">&#8212;Pues ve y haz t&#250; lo mismo.</div><div class="s1">Jes&#250;s visita a Marta y Mar&#237;a</div><div class="p"> 38Mientras segu&#237;an el camino, Jes&#250;s entr&#243; en una aldea, donde una mujer llamada Marta le dio alojamiento. 39Marta ten&#237;a una hermana llamada Mar&#237;a, la cual, sentada a los pies del Se&#241;or, escuchaba sus palabras. 40Marta, en cambio, andaba atareada con los quehaceres dom&#233;sticos, por lo que se acerc&#243; a Jes&#250;s y le dijo:</div><div class="p">&#8212;Se&#241;or, &#191;te parece bien que mi hermana me deje sola con todo el trabajo de la casa? Por favor, dile que me ayude.</div><div class="p"> 41El Se&#241;or le contest&#243;:</div><div class="p">&#8212;Marta, Marta, andas angustiada y preocupada por muchas cosas. 42Sin embargo, una sola es necesaria. Mar&#237;a ha elegido la mejor parte y nadie se la arrebatar&#225;.</div>
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 </div>
</div>

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 <div class="book bkJHN">
 <div class="chapter ch7" data-usfm="JHN.7.10+JHN.7.11+JHN.7.12+JHN.7.13+JHN.7.14+JHN.7.15+JHN.7.16+JHN.7.17+JHN.7.18+JHN.7.19+JHN.7.20+JHN.7.21+JHN.7.22+JHN.7.23+JHN.7.24+JHN.7.25+JHN.7.26+JHN.7.27+JHN.7.28+JHN.7.29+JHN.7.30+JHN.7.31+JHN.7.32+JHN.7.33+JHN.7.34+JHN.7.35+JHN.7.36+JHN.7.37+JHN.7.38+JHN.7.39+JHN.7.40+JHN.7.41+JHN.7.42+JHN.7.43+JHN.7.44+JHN.7.45+JHN.7.46+JHN.7.47+JHN.7.48+JHN.7.49+JHN.7.50+JHN.7.51+JHN.7.52+JHN.7.53">
 <div class="p">10M&#225;s tarde, cuando sus hermanos hab&#237;an subido a la fiesta, acudi&#243; tambi&#233;n Jes&#250;s; pero no p&#250;blicamente, sino de inc&#243;gnito. 11Los jud&#237;os lo buscaban entre los asistentes a la fiesta y se preguntaban:</div><div class="p">&#8212;&#191;D&#243;nde estar&#225; ese hombre?#11,56.</div><div class="p"> 12Y tambi&#233;n entre la gente todo eran comentarios en torno a &#233;l. Unos dec&#237;an:</div><div class="p">&#8212;Es un hombre bueno.</div><div class="p">Otros replicaban:</div><div class="p">&#8212;De bueno, nada; lo que hace es enga&#241;ar a la gente.</div><div class="p"> 13Nadie, sin embargo, se atrev&#237;a a hablar de &#233;l p&#250;blicamente por miedo a los jud&#237;os.#9,22; 19,38; 20,19.</div><div class="s1">Jes&#250;s ense&#241;a en el Templo</div><div class="p"> 14Mediada ya la fiesta, Jes&#250;s se present&#243; en el Templo y se puso a ense&#241;ar. 15Los jud&#237;os, sorprendidos, se preguntaban:</div><div class="p">&#8212;&#191;C&#243;mo es posible que este hombre sepa tantas cosas sin haber estudiado?#Mt 15,34; Lc 2,47.</div><div class="p"> 16Jes&#250;s les contest&#243;:</div><div class="p">&#8212;La doctrina que yo ense&#241;o no es m&#237;a; es de aquel que me ha enviado.#3,31-35; 5,19-23; 12,49; 14,10. 17El que est&#225; dispuesto a hacer la voluntad del que me ha enviado, podr&#225; comprobar si lo que yo ense&#241;o es cosa de Dios o si hablo por cuenta propia. 18El que habla por su cuenta, lo que va buscando es su propio honor. En cambio, quien solamente busca el honor de aquel que lo envi&#243;, es un hombre sincero y no hay falsedad en &#233;l.#8,50. 19&#191;No fue Mois&#233;s quien os dio la ley? Sin embargo, ninguno de vosotros la cumple. &#191;Por qu&#233; quer&#233;is matarme?#1,17; Hch 7,53; Rm 2,21-24.</div><div class="p"> 20La gente le contest&#243;:</div><div class="p">&#8212;&#161;T&#250; tienes un demonio dentro! &#191;Qui&#233;n intenta matarte?#Mc 3,22.</div><div class="p"> 21Jes&#250;s replic&#243;:</div><div class="p">&#8212;He realizado una obra y todos os hab&#233;is quedado sorprendidos. 22Pues bien, Mois&#233;s os impuso el rito de la circuncisi&#243;n (aunque en realidad no proviene de Mois&#233;s, sino de los patriarcas) y, para cumplirlo, circuncid&#225;is aunque sea en s&#225;bado.#Gn 17,10-13; Lv 12,3 (ver Rm 4,11). 23Si, pues, circuncid&#225;is incluso en s&#225;bado para no quebrantar una ley impuesta por Mois&#233;s, &#191;por qu&#233; os indign&#225;is tanto contra m&#237; que he curado por completo a una persona en s&#225;bado?#5,8-9.16; 9,14; Mt 12,1-2.10-13; Mc 3,2-5; Lc 14,1-5. 24No deb&#233;is juzgar seg&#250;n las apariencias; deb&#233;is juzgar con rectitud.#8,15; Lv 19,15; Is 11,3-4.</div><div class="s1">Discusiones sobre Jes&#250;s</div><div class="p"> 25As&#237; que algunos habitantes de Jerusal&#233;n comentaban:</div><div class="p">&#8212;&#191;No es este al que desean matar? 26Resulta que est&#225; hablando en p&#250;blico y nadie le dice ni una palabra. &#191;Ser&#225; que nuestros jefes han reconocido que verdaderamente se trata del Mes&#237;as? 27Pero cuando aparezca el Mes&#237;as, nadie sabr&#225; de d&#243;nde viene; en cambio, s&#237; sabemos de d&#243;nde viene este.#9,29.</div><div class="p"> 28A lo que Jes&#250;s, que estaba ense&#241;ando en el Templo, replic&#243;:</div><div class="p">&#8212;&#191;De manera que me conoc&#233;is y sab&#233;is de d&#243;nde soy? Sin embargo, yo no he venido por mi propia cuenta, sino que he sido enviado por aquel que es veraz y a quien vosotros no conoc&#233;is. 29Yo s&#237; lo conozco, porque de &#233;l vengo y es &#233;l quien me ha enviado.</div><div class="p"> 30Intentaron entonces prenderlo, pero nadie se atrevi&#243; a ponerle la mano encima, porque todav&#237;a no hab&#237;a llegado su hora.#2,4; 7,44. 31Mucha gente crey&#243; en &#233;l y comentaba:</div><div class="p">&#8212;Cuando venga el Mes&#237;as, &#191;har&#225; acaso, m&#225;s milagros que los que este hace?#2,23; 8,30; 10,42; 11,45; 12,11.42.</div><div class="s1">Intentan arrestar a Jes&#250;s</div><div class="p"> 32Lleg&#243; a o&#237;dos de los fariseos lo que la gente comentaba sobre Jes&#250;s y, puestos de acuerdo con los jefes de los sacerdotes, enviaron a los guardias del Templo con orden de apresarlo. 33Pero Jes&#250;s les dijo:</div><div class="p">&#8212;Todav&#237;a estar&#233; con vosotros un poco de tiempo; despu&#233;s volver&#233; al que me envi&#243;.#13,33; 16,5.16-19; 17,18 (ver 14,28; 16,10; 17,11.13). 34Me buscar&#233;is, pero no me encontrar&#233;is, porque no podr&#233;is ir adonde yo he de estar.#8,21; 13,33.36.</div><div class="p"> 35Los jud&#237;os comentaban entre s&#237;:</div><div class="p">&#8212;&#191;Ad&#243;nde pensar&#225; ir este para que nosotros no seamos capaces de encontrarlo? &#191;Tendr&#225; intenci&#243;n de ir con los jud&#237;os que viven dispersos entre los griegos, con el fin de anunciar a los griegos su mensaje?#12,20-21. 36&#191;Qu&#233; habr&#225; querido decir con esas palabras: &#171;Me buscar&#233;is, pero no me encontrar&#233;is, porque no podr&#233;is ir adonde yo he de estar&#187;?</div><div class="s1">El agua viva del Esp&#237;ritu</div><div class="p"> 37El &#250;ltimo d&#237;a, el m&#225;s solemne de la fiesta, Jes&#250;s, puesto en pie, proclam&#243; en alta voz:</div><div class="p">&#8212;Si alguien tiene sed, que venga a m&#237; y que beba#4,10.14; Lv 23,26. 38el que cree en m&#237;. La Escritura dice que de sus entra&#241;as brotar&#225;n r&#237;os de agua viva.</div><div class="p"> 39Dec&#237;a esto refiri&#233;ndose al Esp&#237;ritu que hab&#237;an de recibir los que creyeran en &#233;l. El Esp&#237;ritu, en efecto, no se hab&#237;a hecho presente todav&#237;a, porque Jes&#250;s a&#250;n no hab&#237;a sido glorificado.#16,7; 20,22; Hch 2,4.</div><div class="s1">Diversidad de opiniones sobre Jes&#250;s</div><div class="p"> 40Algunos de los que estaban escuchando estas palabras afirmaban:</div><div class="p">&#8212;Seguro que este es el profeta esperado.</div><div class="p"> 41Otros dec&#237;an:</div><div class="p">&#8212;Este es el Mes&#237;as.</div><div class="p">Otros, por el contrario, replicaban:</div><div class="p">&#8212;&#191;Pero es que el Mes&#237;as puede venir de Galilea? 42&#191;No afirma la Escritura que el Mes&#237;as tiene que ser de la familia de David y de Bel&#233;n, el pueblo de David?#2 Sm 7,12; Is 11,1-2; Jr 23,5; Mi 5,1; Sal 89,3-4 (ver Mt 2,5-6).</div><div class="p"> 43As&#237; que la gente andaba dividida por causa de Jes&#250;s. 44Algunos quer&#237;an prenderlo, pero nadie se atrevi&#243; a ponerle la mano encima. 45Y como los guardias del Templo se volvieron sin &#233;l, los jefes de los sacerdotes y los fariseos les preguntaron:</div><div class="p">&#8212;&#191;Por qu&#233; no lo hab&#233;is tra&#237;do?</div><div class="p"> 46Los guardias contestaron:</div><div class="p">&#8212;Nadie ha hablado jam&#225;s como este hombre.</div><div class="p"> 47Los fariseos replicaron:</div><div class="p">&#8212;&#191;Tambi&#233;n vosotros os hab&#233;is dejado seducir? 48&#191;Acaso alguno de nuestros jefes o de los fariseos ha cre&#237;do en &#233;l? 49Lo que ocurre es que todos estos que no conocen la ley son unos malditos.</div><div class="p"> 50Pero uno de ellos, Nicodemo, que con anterioridad hab&#237;a acudido a Jes&#250;s, intervino y dijo:#3,1-2; 19,39.</div><div class="p"> 51&#8212;&#191;Permite nuestra ley condenar a alguien sin una audiencia previa para saber lo que ha hecho?#Dt 1,16.</div><div class="p"> 52Los otros le replicaron:</div><div class="p">&#8212;&#191;Tambi&#233;n t&#250; eres de Galilea? Examina las Escrituras y ver&#225;s que de Galilea no ha salido jam&#225;s un profeta.#1,46; 7,41.</div><div class="p">[ 53Terminada la discusi&#243;n, cada uno se march&#243; a su casa.#7,53: &#8230;se march&#243; a su casa: Este vers&#237;culo y todo el pasaje siguiente (8,1-11) no figuran en los mejores y m&#225;s antiguos mss. </div>
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